"El cambio de Gobierno no me inquieta"

Simón Pedro Barceló, 38 años, llega a Madrid cuando la ciudad está todavía conmocionada por el atentado. Ha vivido gran parte de esos horribles días en Londres y tiene interés en conocer cómo está el pulso de la ciudad.No le gusta nada saber que está alterado, crispado. No va nada con el carácter de este mallorquín licenciado en Derecho, aficionado a tocar el piano y al fútbol. En su día, también lo fue a la política, que abandonó en 1993 tras haber sido senador por el PP, partido en el que encuentra a alguno de sus mejores amigos. Cauto por naturaleza, el copresidente del Grupo Barceló y presidente de la agrupación Exceltur, asegura con firmeza, sin embargo, que el 11-M no afectará al turismo, y se extraña de que se le pregunte si el cambio de Gobierno le produce alguna inquietud.

"Lo que más deberíamos cuidar en España es el mantenimiento de un equilibrio razonable entre la oferta y la demanda"

"Para orientar la política a un turismo sostenible hay que aceptar una revisión en profundidad del sistema de financiación municipal"

"El Estado de la autonomías nos ha permitido a todos los empresarios tener una relación mucho más cercana con los responsables del turismo"

"Recompramos Barceló Viajes porque no queremos renunciar a una participación importante en el mercado a través de las agencias"

Pregunta. Me imagino que estarán preocupados. El turismo fue uno de los sectores más afectados por el 11-S.

Respuesta. El impacto en lo personal es muy importante. Desde luego, éste ha sido el peor atentado que hemos vivido jamás, pero el sector turístico es muy fuerte. Ha vivido otros atentados y los hemos superado en el pasado, y éste tambiénlo superará.

P. ¿España perderá la condición de país refugio?

R. La de España ha sido una historia de éxito en el turismo mundial. Nos hemos convertido en la segunda potencia turística del mundo y lo tenemos todo para ser la primera. Y lo vamos a conseguir, incluso a pesar de atentados terroristas.

P. ¿No afectará tampoco a los viajes de negocios?

R. Yo no haría una distinción especial respecto a ninguno de los subsectores de la actividad turística. El de negocios, en España está en una posición creciente y lo estará en el futuro. La economía sigue creciendo, sigue generando empresas nacionales cada vez más fuertes y atrayendo cada vez mayor número de empresas internacionales, y eso va a provocar que los motivos de negocios, como ferias o convenciones, se multipliquen, y esa clase de turismo siga creciendo como lo ha heho en los últimos años.

P. ¿Sufrirá la inversión turística española en países como Marruecos o Túnez?

R. Los acontecimientos de estos últimos años nos han obligado a todos a convivir con una situación de inestabilidad en el mundo, y no diría yo que Marruecos haya sido el país más inseguro en los últimos cinco años. Por lo tanto, no creo que la inversión se retraiga. Desgraciadamente, nos vamos a tener que acostumbrar a vivir y seguir desarrollando nuestra actividad sufriendo incidentalmente el terrorismo.

P. Hace unos días el presidente del Consejo de Turismo de la CEOE decía que el turismo en España era un sector privilegiado ¿Participa de esa opinión?

R. Sin duda.

P. También dijo que estaba unido, pese a contar con 17 administraciones distintas.

R. Bueno, los españoles nos dimos en su día una Constitución que consagra un Estado de las autonomías y eso ofrece muchas más ventajas que inconvenientes. Nos ha permitido a todos los empresarios tener una relación mucha más cercana con los responsables del turismo, aunque debemos hacer un esfuerzo para mejorar la coordinación de las actuaciones. Yo creo que en los próximos meses va a ser fundamental que el sector esté lo más unido posible y que trabaje no sólo con la nueva Administración central del Estado, sino con todas las autonómicas y municipales de destinos importantes para enfocar el objetivo de convertir España en un destino turístico invencible.

P. ¿Le preocupa el cambio de Gobierno?

R. No, en absoluto. Hemos tenido ya en España experiencias así y no introduce ningún elemento nuevo de preocupación.

P. ¿Espera cambios importantes?

R. Un cambio de Gobierno supone un cambio importante. Entramos en una nueva etapa de nuevo Gobierno socialista, representada además por un nuevo líder, y seguro que eso va a producir cambios. Pero espero un ejercicio muy responsable del Gobierno y confío en que dentro de sus prioridades esté el turismo por las oportunidades que ofrece.

P. ¿Qué le pediría?

R. Pues eso, que el turismo se convierta en prioridad del Gobierno, y que colabore en una labor que nos corresponde a todos, que es la de incrementar el nivel de reconocimiento social de nuestra actividad. Tenemos que conseguir que todos los españoles seamos cada día algo más conscientes de lo rentable que es la actividad turística para nuestro país, no sólo desde el punto de vista económico, que lo es, sino también desde el punto de vista social. Y por eso tenemos que apostar única y exclusivamente por un turismo sostenible.

P. ¿Le gustaría que hubiera un Ministerio de Turismo?

R. Lo importante es que el sector esté en la cabeza de todos los que forman parte del Gobierno. Yo sería muy partidario de que estuviera encuadrado en un ministerio con capacidad económica suficiente para que pudiera afrontar los retos que tiene.

P. ¿Cuáles son?

R. Lo fundamental es que si coincidimos en ese objetivo de turismo rentable social y económicamente, lo que hay que hacer es ser especialmente cuidadosos en orientar las políticas a esa dirección. Lo que más deberíamos cuidar en España es el mantenimiento de un equilibrio razonable entre la oferta y la demanda, y eso solamente lo podemos conseguir estableciendo unas políticas de crecimiento que estén basadas en la sostenibilidad de nuestros destinos, y en unas políticas de promoción por las cuales nuestro crecimiento en oferta venga acompañado de un incremento de la demanda para ser cada vez más atractivos en más lugares y por motivos distintos.

P. ¿Está en peligro ese equilibrio?

R. En muchos destinos españoles sí, y restablecerlo debería ser una actuación prioritaria.

P. ¿Cómo debería hacerse?

R. No es en absoluto sencillo, entre otras cuestiones, porque requiere una revisión de los sistemas de financiación de los municipios turísticos, con independencia de que sean de costa o de interior.

P. ¿Quiere decir que los ayuntamientos se están financiando con las licencias de construcción de hoteles?

R. En general, y en especial los ayuntamientos turísticos, han basado su financiación en el crecimiento de la oferta tanto hotelera como residencial, y eso no es sostenible en el tiempo. En algunos municipios, como lo que ocurre en las islas, eso se ha hecho evidente, pero en otros se irá haciendo. Hay que aceptar una revisión en profundidad del sistema de financiación municipal.

P. ¿Habría que implantar en algunos lugares, como se hizo en las islas, alguna moratoria para frenar el crecimiento de la oferta?

R. Yo creo que lo que habría que hacer es no establecer como medida de éxito o fracaso de la política turística de cualquier destino el número de visitantes. Ésa es una referencia importante, pero no por encima de la rentabilidad, de la creación de valor económico y de su distribución en forma de mayor renta per capita.

P. A la asociación Exceltur, que agrupa a las grandes empresas involucradas en el sector, la acusan de ejercer de lobby en contra de los intereses de las pequeñas y medianas empresas.

R. Nosotros en ningún momento vamos a pedir a la Administración una política de numerus clausus, en ningún caso. Sí queremos trasladar claramente que la actividad económica se basa en un equilibrio muy sensible de oferta y demanda, que España ha conseguido un nivel de desarrollo y calidad en el producto turístico que necesitamos cobrar efectivamente, y que cada nuevo incremento en capacidad en un destino es un ataque al incremento de generación de valor.

P. ¿Por qué esta pasión de bancos, cajas o inmobiliarias por construir hoteles?

R. Todo el mundo reconoce al sector turístico como el más importante de la economía española. Es una actividad económica muy agradable, de las más simpáticas, y en los últimos años ha atraído a otros actores de la actividad económica y eso yo creo que es positivo. Que nos vean como un sector donde invertir pienso que es muy bueno.

P. ¿Cómo está en estos momentos el Grupo Barceló?

R. Nuestra posición en el negocio turístico está fundamentalmente en la hostelería, en donde tenemos algunas características especiales. Somos la compañía hotelera española líder en Estados Unidos, y la única que tiene una posición estratégica en uno de los grandes grupos turísticos europeos, First Choice. Operamos 150 hoteles, 40 serán propiedad mayoritaria del grupo en septiembre, cuando concluya la Operación Grubarges; asumiendo la operación Fadesa, 20 tendrán participación minoritaria, unos 70 son contratos de gestión y entre 10 y 15 son arrendamiento.

P. Parece que tienen una estrategia de ida y vuelta. Venden Barceló Viajes y luego la recompran, crean Grubarges y luego se deshace.

R. Bueno, en el año 2000 tomamos una decisión estratégica muy importante, que es la de centrarnos en hoteles y aportar nuestro negocio de viajes a un grupo mayor, con presencia en mercados muy importantes para nosotros, como el británico para los hoteles españoles, o el canadiense para los hoteles en el Caribe, y acertamos con el socio elegido. Aportamos la división de viajes a First Choice -donde participamos con el 21%-, que es el grupo turístico europeo con la posición financiera más sólida y nuestro principal cliente. Todavía nos queda muchísimo terreno por caminar en el incremento de nuestra relación comercial, pero estamos muy satisfechos de esta colaboración. Ahora bien, la dirección de First Choice cree, y nosotros lo apoyamos, que es más importante crecer en producto especializado y no como touroperadores de turismo masivo, y se plantea la desinversión en Viajes Barceló. Es entonces cuando ejercemos nuestro derecho de opción preferente, porque no hemos querido renunciar a una participación importante en el mercado turístico español a través de las agencias de viajes.

P. ¿Y Barceló Viajes se queda ya en casa?

R. Se queda en casa.

P. ¿Por cuánto tiempo?

R. Esas cosas nunca se saben.Nunca imaginamos que cuatro años después de aportarla a First Choice volveríamos a adquirir la compañía.

P. Tampoco pensaron deshacer Grubarges.

R. No se deshace. Los socios, o sea, FCC, BBVA, y nosotros llegamos a un acuerdo a finales del verano pasado para llevar a cabo un proceso de desinversión de los hoteles propiedad de la sociedad en EE UU y España. Ese proceso debe acabar en septiembre. Barceló se quedará con la sociedad que, para entonces, tendrá sólo como activos los cuatro hoteles en México y los terrenos adyacentes para seguir creciendo en Riviera Maya. Es nuestro proyecto estrella. Seguiremos invirtiendo allí con promotores y compañías,que estarán en minoría, para conseguir la gestión y operar esos hoteles al modo que hemos llegado con Fadesa.

P. ¿Cumplió Grubarges sus objetivos?

R. Desde el punto de vista de Barceló, sí, en cuanto que nos unimos a dos grandes grupos económicos en nuestro país, pudimos crecer en muy poco tiempo de una forma muy rápida -en dos años se invirtieron 600 millones de euros, cosa que era inabordable para nosotros en los años 98 y 99- e incorporamos un montón de hoteles en gestión con la marca Barceló en España y en México. Estaba previsto que Grubarges pudiera salir a Bolsa. Desgraciadamente, los acontecimientos del mercado en estos últimos años no han permitido hacer esa operación, y la mejor decision para todos ha sido poner a la venta los activos, con la excepción de los que nos quedamos, y destinar lo que se obtenga al pago de la deuda y el retorno de los accionistas.

P. ¿No buscarán otros socios para la sociedad?

R. No, invertiremos nosotros en la expansión en Riviera Maya a partir de septiembre.

P. ¿Qué persiguen con el acuerdo con la inmobiliaria Fadesa?

R. Es una oportunidad magnífica de colaborar con un gran grupo español inmobiliario que ha crecido muchísimo y que una parte de sus recursos los va a dedicar a inversión hotelera. Nos da una magnífica oportunidad para gestionar hoteles.