El BCE minimiza las tensiones en los precios e insta a seguir las reformas
El Banco Central Europeo (BCE) confía en la evolución positiva de la economía en el conjunto de la zona euro y minimiza los riesgos inflacionistas en 2004, aunque en su último informe mensual, la autoridad monetaria insta a los países europeos a continuar con sus reformas estructurales para garantizar un crecimiento sostenido. Pero el presidente del Bundesbank y miembro del consejo de gobernadores del BCE, Ernst Welteke, discrepa: cree que hay más posibilidades de que la economía europea se deteriore que de su recuperación, por eso cree necesaria una bajada de tipos de interés.
La perspectiva favorable de estabilidad de precios a medio plazo, unida a la mejora de la actividad económica (contrastada ya desde el segundo semestre de 2003) y a la de los indicadores de confianza empresarial y de los consumidores, justificaron la decisión tomada el pasado jueves por el banco emisor de mantener el precio del dinero en el 2%.
Ahora, en el boletín de marzo publicado ayer, el BCE subraya que la mejora de la demanda externa favorece las exportaciones de la eurozona y destaca que en el conjunto de los Doce se ha producido una mejora de la inversión fruto de las condiciones actuales de financiación. Respecto al consumo, el BCE prevé una mejora en 2004 gracias a la reducción de precios de importación y a los recortes de impuestos, a lo que se une la mejora de las condiciones de los mercados de trabajo.
Posible bajada de tipos
La evolución de los precios en 2004 se verá caracterizada por fluctuaciones por el efecto de los precios energéticos y del incremento de los impuestos indirectos, pero se mantendrán dentro del objetivo de estabilidad del 2%.
El presidente del Bundesbank no se muestra tan optimista. "Los riesgos de deterioro de la evolución coyuntural son, con toda probabilidad, mayores que las opciones de mejora de la actividad en Europa y Alemania", afirmó ayer Welteke en Berlín.
Los factores de riesgo se centran, a su juicio, en la fortaleza del euro frente al dólar, que frena las exportaciones europeas; el consumo interior, que calificó de "decepcionante", y "la relativa debilidad del consumo". Welteke esbozó una posible bajada de tipos al constatar los riesgos de desaceleración.
Varios institutos de coyuntura coinciden con la cautela de Welteke. El IfW, uno de los seis principales institutos de estudios económicos de Alemania, ha revisado a la baja su pronóstico de crecimiento para Alemania en 2004 al 1,6% frente al 1,8% anterior, debido a la fuerte presión del euro.
El BCE está dispuesto a tolerar una apreciación máxima del euro frente a la divisa estadounidense de 1,30 dólares, según indicaron a la agencia Bloomberg fuentes cercanas al Consejo de Gobierno de la institución. El euro se cambiaba ayer a 1,2267 dólares.
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