La vivienda nueva creció un 18,5% en 2003, la mayor alza desde 1990

Los precios de la vivienda nueva subieron el 18,5% el pasado año (12,2% en 2002), la mayor alza en los últimos 13 años, según datos de la sociedad de tasación Tinsa. Mientras la vivienda nueva sigue disparada, la usada se moderó hasta crecer un 16,7%, un punto menos que en 2002. Tinsa aprecia una saturación en el mercado inmobiliario y espera que durante este año se produzca una desaceleración en el crecimiento de los precios.

El precio medio de la vivienda nueva libre se situó en 1.625,2 euros por metro cuadrado a cierre de 2003, lo que supone un aumento del 18,51% respecto a 2002, mientras que los pisos usados se encarecieron un 16,7%, hasta situarse en una media de 1.330,5 euros por metro cuadrado.

La subida del precio de los pisos nuevos alcanzó el 21,8% en las capitales de provincia, donde el metro cuadrado cotizó a 2.167 euros, mientras que el aumento medio en el resto de poblaciones fue del 15,6% (1.330 euros).

El director general de Tinsa, Luis Leirado Campo, explicó ayer que "después de las fuertes subidas en las capitales, las alzas han llegado a los segundos y terceros cinturones de las ciudades, y ello evidencia que hay una cierta saturación". Otro argumento sobre la saturación del mercado inmobiliario se aprecia en la ralentización de las ventas. "Los agentes inmobiliarios nos comentan que ahora se tarda más tiempo en vender. Creo que empezamos a situarnos en la parte llana del ciclo alcista de los precios". Además, el descenso en la subida de los precios de viviendas usadas que son más flexibles al cambio de tendencia sería otro indicativo de la moderación futura.

Aunque Leirado no quiso ofrecer un pronóstico sobre el crecimiento de los precios en 2004, explicó que los distintos intervenientes del sector esperan subidas de precios en torno al 10%.

El director general de Tinsa explicó que siguen presionando numerosos factores para que exista demanda de vivienda y calcula que en los próximos años se mantendrá una demanda de unas 450.000 viviendas cada ejercicio. Durante 2003 la construcción de viviendas se elevó a más de 650.000 unidades.

Murcia (26%), Castilla-La Mancha (23%) y Andalucía (21%) son las comunidades en las que más se incrementó el valor de tasación medio de la vivienda libre usada el pasado año. La Comunidad de Madrid es donde se registraron los precios más altos por metro cuadrado (2.368,1 euros) y una subida del 19% respecto al mismo periodo del año anterior. Madrid es la capital con la vivienda más cara, ya que el metro cuadrado se cotiza a 2.808,2 euros.

Tras Madrid, las capitales con precios más altos son Barcelona (2.385 euros el metro cuadrado), Bilbao (2.224 euros) y Pamplona (1.897,1 euros), en tanto que las que registraron precios más bajos fueron Lugo (654,4 euros), Badajoz (886,6 euros), Pontevedra (924,9 euros) y Zamora (949,6 euros). La subida más alta dentro de las capitales se produjo en Huesca, con un incremento del 32%, y la única que bajó su precio fue León (un 5%).

Polémica política

Esta fuerte subida registrada en 2003 -la mayor de los últimos 13 años en el caso de la vivienda nueva- provocó ayer la polémica política. El vicepresidente primero del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, explicó que el sector se encuentra en una expansión constante, pero la demanda sigue siendo más potente que la oferta. Reiteró que en los próximos años el precio de la vivienda se desacelerará, al existir las alternativas de inversión en Bolsa y por la progresiva satisfacción de la demanda. No obstante, consideró que las administraciones tienen que dedicar recursos públicos a crear suelo urbano que, aseveró "sigue siendo caro".

La secretaria federal de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del PSOE, Cristina Narbona, calificó ayer de "ignorante, cínico o las dos cosas" al vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, por sus declaraciones sobre lo "muchísimo" que ha disminuido el esfuerzo para pagar una vivienda. En declaraciones a Efe, Narbona hizo alusión a la entrevista televisiva en la que Rato apuntó ayer que el esfuerzo que una familia para afrontar el pago de una vivienda ha pasado de ser el 60% del sueldo al 45% ó 40%.