¿Multicultural Barcelona?
Parece mentira que a menos de cien días para el inicio del Fòrum el Ayuntamiento de Barcelona pretenda acabar con una de las más importantes expresiones espontáneas de multiculturalismo que se viven en la ciudad, la que se da los fines de semana en el parque de la Ciutadella.
El parque se ha convertido en un punto de reunión donde centenares de jóvenes de distintos países y culturas se encuentran para leer, escribir, pasear, practicar tai-chi, hacer juegos malabares, tocar instrumentos, degustar comida típica, comprar en un mercadillo improvisado o simplemente pasar un buen rato en un ambiente festivo multicultural.
El Ayuntamiento de Barcelona considera que se está haciendo un uso incívico del parque y ha iniciado una campaña de sensibilización para recordar que no se puede pisar el césped, tocar instrumentos de percusión o utilizar altavoces, y que está prohibida la venta ambulante, así como llevar mascotas sin atar. Si esta campaña no surte efecto, está previsto que intervenga la Guardia Urbana.
El parque de la Ciutadella se llena los fines de semana de magia, sabor, ritmo, color y vida. Una ciudad en la que se respira cada vez más el mestizaje no puede atajar uno de sus principales pulmones.
