_
_
_
_

Una colaboradora de Zaplana cobra el paro y trabaja para el ministerio sin percibir sueldo

Eduardo Zaplana, ministro de Trabajo y Portavoz del Gobierno, tiene en el departamento de prensa de su ministerio a una colaboradora que no percibe sueldo y cobra, desde octubre pasado, el seguro de desempleo, según informó ayer el diario valenciano Levante. La colaboradora de Zaplana -la periodista Cristina Grau, que fue jefa de prensa de la Consejería de Cultura de la Generalitat Valenciana hasta el cambio de Gobierno tras las elecciones de mayo pasado- argumenta su colaboración gratuita con Trabajo por "lealtad personal y política" con el ministro.

"¿Trabajar sin cobrar es delito? Porque yo estoy trabajando sin cobrar", argumenta. Añade que, para ella, la "lealtad política está por encima de todo", que "en política se está por lealtad y no por dinero", y que no ve "qué tiene de malo echar una mano sin cobrar". Grau no es militante del PP y relata que el ministro le dijo que no podía ofrecerle nada ahora, pero que "quizá podría encontrarle algo después de las elecciones" generales de marzo.

Para desarrollar su función, la colaboradora utilizaba en el Ministerio de Trabajo un puesto en el gabinete de prensa, un ordenador, un correo electrónico, una extensión telefónica y un teléfono móvil. La jefa de prensa del ministerio, Elena Sánchez, asegura que facilitó esta infraestructura a la colaboradora de Zaplana a iniciativa propia, sin consultárselo al ministro y sin pensar que cometiera ninguna irregularidad. Sánchez subraya que no había ningún tipo de relación contractual con Grau, que su tarea no estaba sujeta a horarios y que, sobre todo, acompañaba al ministro en algunos desplazamientos a la Comunidad Valenciana, donde es presidente regional del PP.

"Parece un fraude de ley"

Enrique Lillo, abogado de Comisiones Obreras, mantiene que esta relación de colaboración desinteresada "parece un fraude de ley". Argumenta que los trabajos desinteresados se realizan "como voluntario en una ONG o una parroquia, o como militante en un partido o sindicato, y el Ministerio de Trabajo no es una organización ideológica sino la máxima autoridad responsable del buen funcionamiento del mercado de trabajo en España".

Este abogado de CC OO matiza que la Inspección de Trabajo tendría que investigar para ver si las tareas que cumplía la colaboradora de Zaplana serían calificables como de trabajo asalariado. Y opina que si la Inspección concluye que las tareas que realiza la colaboradora de Zaplana son propias de un asalariado, el empleador "habría incumplido el deber de retribución". El ministerio hizo ayer una consulta al Inem para indagar si tal colaboración era o no compatible con el cobro del paro. La respuesta fue que sería compatible si se considera un "trabajo por amistad, benevolencia o buena vecindad", tal como lo recoge el artículo 1.3.d del Estatuto de los Trabajadores.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_