"Necesitamos que Europa convenza a EE UU"

Cuáles son las condiciones que desea la Autoridad Palestina para sentarse a negociar la paz con Israel?

Respuesta. Nuestra referencia es la que se fijó en Madrid en 1991. Es decir, el cumplimiento de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas 242 y 338, que piden el fin de la ocupación israelí. O, lo que es lo mismo, la Hoja de Ruta [el último plan de paz elaborado por EE UU, Rusia, la Unión Europea y la ONU], con tres pasos para establecer un Estado palestino dentro de las fronteras de 1967. Ésos son nuestros requisitos para sentarnos a negociar la paz.

P. Israel pide a cambio seguridad. ¿Puede el Gobierno palestino garantizarla?

R. La Autoridad Nacional Palestina (ANP) está dispuesta a cumplir los compromisos que estipula la Hoja de Ruta, incluidos los de seguridad. Yo le digo a mis colegas israelíes que si quieren seguridad tienen que lograr la paz con los palestinos y poner fin a los asentamientos, a la ocupación, a la construcción del muro y a los asesinatos.

"El muro separa a palestinos de palestinos; confisca las tierras de los palestinos. Si Israel quiere construir un muro en su territorio, que lo haga, nadie va a decirles nada"

"En su discurso [sobre el estado de la Unión, pronunciado el pasado martes], Bush ni siquiera nos mencionó, no habló de la paz entre los israelíes y los palestinos"

P. Eso es por parte de Israel, pero ¿y del lado palestino?

R. Si quieren seguridad, ¿por qué destruyen nuestras fuerzas de seguridad, que controlan Ramala, Hebrón, Tulkarén o Yenín? ¿Por qué destruyen nuestras comisarías de policía, nuestros vehículos? Eso es lo que tenemos, unas fuerzas de seguridad pequeñas y destruidas; sin embargo, ellos tienen uno de los ejércitos más poderosos del mundo. ¿Cómo pueden atarme las manos y las piernas y decirme al mismo tiempo que me tire al agua y nade? Aun así, estoy dispuesto a asumir los compromisos en materia de seguridad que establece la Hoja de Ruta.

P. ¿Y cómo piensa lograrlo?

R. Sentándonos a negociar. La primera etapa de la Hoja de Ruta establece que el cuarteto [EE UU, Rusia, la UE y Naciones Unidas] juzgará los progresos de ambas partes, no Israel. El plan preve además que sea el cuarteto el que proporcione la ayuda necesaria para reconstruir y entrenar a nuestras fuerzas de seguridad.

P.¿En qué han quedado los esfuerzos del primer ministro palestino, Ahmed Qurei, destinados a alcanzar un acuerdo para una tregua de los grupos radicales palestinos? El ataque la semana pasada de una suicida de Hamás en el paso de Erez, ¿dinamita definitivamente cualquier esperanza de lograr un alto el fuego?

R. Los egipcios están trabajando en ello, y espero que el resto de la comunidad internacional les apoye para continuar el diálogo entre las facciones palestinas y lograr una tregua de todos estos grupos. Espero que Egipto tenga éxito y entonces Israel asuma recíprocamente sus obligaciones de acuerdo con la Hoja de Ruta.

P. Hace meses que no se producen progresos de acuerdo con el plan diseñado por la Hoja de Ruta. Más bien asistimos a ciertos retrocesos: crecen los asentamientos israelíes (un 16% en los últimos tres años), continúan los ataques suicidas palestinos, Israel levanta a marchas forzadas un muro de separación en Cisjordania. ¿Es posible resucitar la moribunda Hoja de Ruta?

R. Del todo. La Hoja de Ruta es un buen documento. Creo que la clave del éxito es resucitar el papel del cuarteto, entonces la Hoja de Ruta tendrá posibilidades. Si la Hoja de Ruta no ve la luz, habrá más asentamientos y más violencia, y eso es precisamente lo que está sucediendo ahora y lo que mina el proceso de paz. Y por eso pido al cuarteto que renueve su compromiso, porque en su discurso, Bush [el discurso sobre el estado de la Unión, pronunciado por el presidente de EE UU el pasado martes por la noche] ni siquiera nos mencionó, no habló de la paz entre los israelíes y los palestinos. Lo que puede significar que en 2004, año de elecciones en EE UU, podría romperse el compromiso con el proceso de paz. Es un error. Bush quiere libertad y democracia en Oriente Próximo, pero ¿cómo conseguirlo sin paz? Es crucial que la Hoja de Ruta permanezca sobre la mesa.

P. Esta semana ha asistido en Madrid a un seminario, organizado por el Real Instituto Elcano, dedicado, entre otros temas, a la contribución europea al proceso de paz. Israel no considera a la UE un interlocutor válido, y el primer ministro israelí, Ariel Sharon, ni siquiera acepta recibir al nuevo representante de la UE para la zona. En estas condiciones, ¿creen de verdad que la diplomacia europea puede producir avances significativos?

R. Primero debo destacar que uno de los problemas es que la UE no tiene una política exterior común, tiene 15, y a partir de ahora va a tener 25. Sin embargo, Europa sigue siendo el mejor socio para israelíes y palestinos. Europa ha hecho mucho, mucho. Gente como (el ex representante especial de la UE en Oriente Próximo, Miguel Ángel Moratinos). Él ha hecho más por la paz en la zona que ningún otro enviado. Necesitamos a Europa, porque Europa

puede convencer a EE UU. Existen buenas relaciones entre Aznar y Bush, Blair y Bush, Berlusconi y Bush.

P. ¿Y Estados Unidos, que apadrinó la Hoja de Ruta y al que ahora acusan de ausentarse?

R. Estados Unidos es la clave. Washington debería enviar hombres para supervisar el plan de paz sobre el terreno, debería establecer un calendario. Instamos a Bush a que lo haga si quiere democracia,

libertad y estabilidad en Oriente Próximo. Bush tiene que

entender que la clave es la solución al conflicto palestino-israelí.

P. Cómo afecta al proceso de paz el muro que erige Israel en Cisjordania?

R. El muro es lo más peligroso para el futuro de la región. Ha sido construido sobre las fronteras de 1967, está usurpando las tierras palestinas y destroza la solución

de dos Estados y la Hoja de Ruta, y por eso Bush tiene que exigirle a Sharon que acabe con el muro. La Hoja de Ruta ordena a Israel ceñirse a las fronteras de 1967, y eso no

es lo que está sucediendo. Es un desastre para la población palestina.

Una catástrofe humana. Un desastre económico, agrícola, educativo, social y cultural.

P. Pero para Israel el muro es la única forma de garantizar la seguridad en su territorio, y pone el

ejemplo de Gaza…

R. Imaginemos que España quiere protegerse de Francia, a y que para ello quiere construir un

muro. ¿Dónde lo construiría, alrededor de París o en la frontera entre ambos países? El muro no separa

a israelíes de palestinos, sino a palestinos de palestinos, están confiscando tierras de palestinos; no es una barrera de seguridad, sino un muro para perpetrar la ocupación

y proteger los asentamientos israelíes, que encierra a los palestinos como prisioneros en sus

ciudades y campos de refugiados. Si Israel quiere construir un muro en su territorio, que lo haga, nadie va a decirles nada.

P. El 23 de febrero se celebra la primera vista oral sobre el muro en el Tribunal Penal Internacional

de La Haya. ¿Creen que la acción de la justicia internacional podrá logar lo que no han conseguido ni la ONU ni EE UU?

R. No vamos a entrar a valorar las decisiones de ese tribunal, la respetamos. Creemos en el imperio

de la ley, y por eso creemos que Israel debería acatar la sentencia de ese tribunal, porque la comunidad internacional que cree en ella no puede tolerarlo.

P. Ariel Sharon y Ahmed Qurei todavía no se han visto las caras desde que el palestino asumió el cargo el pasado octubre. ¿Qué es lo que no marcha entre los dos?

R. Estamos tratando de preparar un encuentro entre Sharon y Qurei. Hemos mantenido dos o tres reuniones con nuestros colegas israelíes para lograrlo, y creo que es posible que lo consigamos.

P. ¿Qué papel debe desempeñar el presidente palestino, Yasir Arafat? Para Sharon, la paz con

Arafat es imposible. Otros, como Yosif Beilin, ex ministro israelí de Justicia, consideran que sin él tampoco es posible avanzar. ¿Es Arafat el obstáculo o la clave para la paz?

R. Arafat es el líder palestino. Y todo el mundo debe respetar esa elección democrática de los palestinos. Arafat es el jefe elegido por su pueblo. Él es el presidente palestino, el que ha designado a Abú Alá.