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Entrevista:AVI GIL | EX DIRECTOR GENERAL DEL MINISTERIO DE ASUNTOS EXTERIORES DE ISRAEL | ENTREVISTA

"Sharon se rindió a la presión social y erigió la valla"

Ana Carbajosa

Cuáles son las condiciones de Israel para sentarse a negociar la paz con la Autoridad Palestina?

Respuesta. Primero debo dejar claro que mis opiniones no representan al Gobierno israelí. Hablo a título personal, y creo que la cuestión clave es la seguridad. Es decir, que los palestinos cumplan sus compromisos en materia de seguridad y combatan eficazmente el terrorismo. Evidentemente, con el apoyo de Israel y el resto de la comunidad internacional.

P. ¿Quién puede garantizar esa seguridad en la Autoridad Palestina?

R. Ése es precisamente el mayor obstáculo, diría que un obstáculo gigantesco. Por el momento, la capacidad de los palestinos para garantizar la seguridad la ostentan, obviamente, el Gobierno palestino y el primer ministro Ahmed Qurei (Abú Alá). Pero no creo que nadie sea capaz de garantizar la seguridad en 24 horas, especialmente después de estos tres años horribles y sangrientos. Se trata de un proceso, y este proceso debería ser apoyado por todos, incluido Israel. Pero debe ser impulsado por los palestinos. Es importante que Israel y el resto de la comunidad internacional vean que los palestinos dan los primeros pasos. Eso pondría a funcionar la Hoja de Ruta.

"Sharon se ha mostrado dispuesto a entrevistarse con Ahmed Qurei. En este momento los palestinos se muestran reticentes a un encuentro. Ahora les toca a los palestinos dar el paso"
"El enviado de EE UU ni siquiera está en la zona. No creo en la diplomacia por control remoto y me gustaría que los americanos volvieran al terreno para liderar el cuarteto"
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P. Hace meses que no se producen progresos de acuerdo con el plan diseñado por la Hoja de Ruta. Más bien asistimos a ciertos retrocesos: crecen los asentamientos israelíes (un 16% en los últimos tres años), continúan los ataques suicidas palestinos, Israel levanta a marchas forzadas un muro de separación en Cisjordania. ¿Es posible resucitar la moribunda Hoja de Ruta?

R. Hoy por hoy es la única carta sobre la mesa. Cuenta con el apoyo de Europa, EE UU y el resto de la comunidad internacional, además de la de palestinos e israelíes. Según el calendario que establece el documento, hoy, a principios de 2004, deberíamos estar al principio de la tercera fase. En esta fase está prevista la celebración de la segunda conferencia internacional y la aprobación de un Estado palestino provisional. Después vendría el lanzamiento de la última fase de la Hoja de Ruta, que daría paso al final del conflicto y al reconocimiento de un Estado independiente. Obviamente no estamos en ese punto, pero ambas partes pueden hacer mucho para avanzar.

P. Pero para ello deben cumplir los compromisos que establece el plan de paz, entre ellos, el cese de los asentamientos ilegales...

R. Hay un compromiso por parte de Israel para desmantelar los asentamientos no autorizados, que se han asentado en los últimos dos o tres años. De todas maneras, esos asentamientos ilegales deberían ser destruidos en la tercera fase de la Hoja de Ruta. Por eso, el problema no es elegir este o aquel aspecto del proceso de paz, sino que hay que conseguir que se ponga en marcha y luego cada parte deberá cumplir los compromisos que están estipulados con detalle en el documento. Por eso no pienso que los asentamientos sean un obstáculo para la puesta en marcha de la Hoja de Ruta. Es más, el funcionamiento del plan ayudaría, y mucho, a acabar con esos asentamientos ilegales.

P. ¿Qué papel debe desempeñar la comunidad internacional en el conflicto israelo-palestino, y en particular Europa, teniendo en cuenta que el Gobierno de Sharon se niega a recibir al enviado europeo para Oriente Próximo?

R.

Yo participé en el proceso de Oslo y en otras negociaciones. Pensaba que no era necesaria ninguna mediación, que era posible que israelíes y palestinos se sentaran juntos y se entendieran. Desafortunadamente, ésta no es la situación después de más de dos años de Intifada. Hoy, el nivel de confianza mutua es muy bajo y necesitamos la ayuda de un tercero. Por otro lado, pienso que hay una exageración por parte de aquellos que dicen que Europa no está desempeñando un papel significativo. Durante mis años como director general del Ministerio de Exteriores solía ver al enviado europeo, Moratinos, mucho más que a ningún otro enviado extranjero. Y si miramos a la Hoja de Ruta, encontraremos la impronta de la diplomacia europea. Europa es una parte muy importante del cuarteto. La UE puede además contribuir en el ámbito económico, de la seguridad regional y en muchos otros campos. Europa debe también participar en una tarea importantísima que es la reforma de la Autoridad Palestina, en la que ya está muy implicada.

P. ¿Y Estados Unidos?

R. Los esfuerzos para activar y mantener viva la Hoja de Ruta precisa de estadounidenses sobre el terreno. El cuarteto necesita ser liderado por EE UU, pero, desafortunadamente, esto no ocurre hoy. Por razones obvias, Washington está centrado en Irak. El enviado estadounidense para Oriente Próximo

[el subsecretario de Estado, John Wolf] hace tiempo que ni siquiera está en la zona. Yo no creo en la diplomacia por control remoto, y me gustaría que los americanos volvieran al terreno para liderar el cuarteto.

P. ¿Cómo afecta al proceso de paz el muro que erige Israel en Cisjordania

R. Yo estoy en contra de la verja, sobre todo en contra de aquellos tramos que se adentran en Cisjordania, pero al mismo tiempo no debemos olvidar que la construcción de la valla es el resultado de los continuos ataques terroristas palestinos. Es una medida preventiva por parte de Israel. El primer ministro israelí se ha resistido durante mucho tiempo a levantar la valla, pero al final se ha tenido que rendir a la presión de la sociedad israelí, que es el objetivo de los atentados. Creo que si comienzan las negociaciones de paz, la verja se puede retirar, puede cesar la construcción. La verja es el resultado de la violencia, no es producto de una estrategia política.

P. Entonces, ¿por qué no respeta las fronteras de 1967?

R. Creo que debería ceñirse a la línea verde. Y si no es así, esto es debido a la presión de los asentados y de los políticos israelíes que desearían ver esos asentamientos anexionados a Israel.

P. El muro se construye para proteger a Israel, ¿pero no cree que también pueda resultar contraproducente y generar más violencia?

R. La verja no es la solución única para los problemas de Israel. A veces podría dificultar la tarea de los suicidas, incluso podría impedir algún ataque, pero es verdad que a veces también intensificará el odio y la humillación; pero, insisto, esa medida israelí es una reacción a los sangrientos y terribles ataques a civiles en Israel.

P. El 23 de febrero se celebra la primera vista oral sobre el muro en el Tribunal Penal Internacional de La Haya. ¿Creen que la acción de la justicia internacional podrá lograr lo que no han conseguido ni la ONU ni EE UU?

R. No sé qué va a pasar. Puede que se produzcan modificaciones en el trazado de la verja, pero para mí es sólo un síntoma de que vamos por el camino equivocado, de que somos incapaces de llegar a un acuerdo. El esfuerzo debería estar dirigido a activar la Hoja de Ruta. En cualquier caso, es un tribunal que no tiene poder coercitivo para hacer cumplir sus sentencias.

P. Ariel Sharon y Ahmed Qurei todavía no se han visto las caras desde que el palestino asumió el cargo en octubre. ¿Qué es lo que no marcha entre los dos?

R. Sharon se ha mostrado dispuesto a entrevistarse con Alá. En este momento, los palestinos se muestran reticentes a un encuentro. Ahora les toca a los palestinos dar el paso. Sharon y Qurei se han reunido más de una vez en el pasado, de manera no oficial, así que no se trata de un problema personal.

P. ¿Qué papel debe desempeñar el presidente palestino, Yasir Arafat?

R. Depende del propio Arafat. Hemos visto recientemente cómo incluso Gaddafi ha sido capaz de sorprender al mundo, y el mundo ha reconsiderado su actitud hacia él. ¿Por qué no podría pasar lo mismo con Arafat? La pelota está en su tejado. Tiene que dar una orden muy clara a las fuerzas de seguridad palestinas para que detengan las acciones terroristas.

ULY MARTÍN

Avi Gil

Laborista, abandonó hace año y medio su puesto de director general del Ministerio de Asuntos Exteriores en el Gobierno israelí. En los últimos 13 años ha ocupado diversos cargos en el Ejecutivo israelí y participó en los Acuerdos de Oslo.

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Sobre la firma

Ana Carbajosa
Periodista especializada en información internacional, fue corresponsal en Berlín, Jerusalén y Bruselas. Es autora de varios libros, el último sobre el Reino Unido post Brexit, ‘Una isla a la deriva’ (2023). Ahora dirige la sección de desarrollo de EL PAÍS, Planeta Futuro.

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