Sanidad contratará equipos privados para la radioterapia en Elche

La Consejería de Sanidad ha convocado un concurso para que una empresa privada sea la encargada de prestar el servicio de radioterapia en el hospital general universitario de Elche. El objetivo del concurso es que, mediante un concierto, una empresa sea la encargada de instalar dos equipos de aceleradores lineales y de realizar el tratamiento de radioterapia para atender a los pacientes de la red sanitaria pública que requieran este servicio, según recoge el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana. El anuncio fija un presupuesto base de licitación de 9,4 millones de euros y el pliego de condiciones estipula que los equipos se instalarán en la planta sótano del nuevo edificio que se construirá en el hospital y que el tratamiento "se llevará a cabo con los medios materiales y humanos de la empresa adjudicataria que deberá soportar todos los gastos derivados del tratamiento específico". El pliego señala que la finalización prevista del contrato es el año 2012, momento en el que el servicio revertirá a la Administración "sin perjuicio de que pueda realizar una nueva contratación o prorrogarlo".

De esta forma, el departamento que dirige Vicente Rambla ha optado por un sistema similar al elegido por su predecesor, Serafín Castellano, para dotar de equipos de resonancia magnética en los centros sanitarios. En vez de comprar alta tecnología, Sanidad cede la gestión al sector privado, aloja los equipos en los hospitales públicos y paga por las explotaciones y terapias que se realicen. Así Sanidad sigue los pasos del hospital General de Valencia, que instaló un primer equipo privado en 1999 -cuando aún dependía plenamente de la Diputación- y en octubre del año pasado un segundo.

La diputada socialista Encarna Llinares denunció que este concurso es un paso más de la privatización de la sanidad que impulsa el PP. "Se está descapitalizando la sanidad y se están troceando los servicios rentables para cederlos al sector privado", apuntó la portavoz de sanidad del PSPV. Llinares comentó otros problemas asociados, como el que supone privar a los profesionales de la red pública de equipos de alta tecnología, lo que impide que se formen en los instrumentos de última generación.