Francia pide a España que suba el precio del tabaco

El ministro francés de Economía, Francis Mer, exigió ayer a sus homólogos en la reunión del Ecofin que los países europeos donde los precios del tabaco son más bajos, como es el caso de España, impongan un mayor gravamen sobre ese producto para evitar el "turismo fiscal", es decir, las compras masivas de cigarrillos en los Estados con precios más reducidos para consumirlos o venderlos en otras zonas de Europa. Francia acaba de incrementar sensiblemente los impuestos sobre el tabaco y teme que muchos franceses acaben fumando cigarrillos adquiridos en España, Luxemburgo o Bélgica.

Mer no tuvo éxito alguno en su demanda. La primera reacción negativa vino de la propia Comisión, cuyos portavoces recordaron que hace sólo año y medio entró en vigor la directiva para armonizar las accisas o impuestos sobre el tabaco. Esa directiva ya fijó en 60 euros por cada 1.000 cigarrillos la accisa mínima en la UE a partir de julio de 2002 y se elevará a 64 en 2006. España y Grecia lograron un periodo transitorio para ambos y sólo tendrán que aplicar ese nivel impositivo en 2008.

El Gobierno francés, como otros de la UE, ha decidido ir más lejos y acaba de aprobar una accisa sobre el tabaco de 128 euros por cada 1.000 cigarrillos. Mer propuso ayer que los países de la UE eleven ese impuesto, al margen del IVA, hasta 105 euros para evitar los perjuicios para su país derivados de las grandes diferencias de precios. Además, solicitó que se reduzca la cantidad máxima de 800 cigarrillos que hoy se considera de consumo privado a la hora de poderlos comprar en un país y trasladarlos a otro sin problemas fiscales.

Hoy, y debido a las diferentes accisas aplicadas y al IVA, los precios de una cajetilla de tabaco rubio oscilan en la UE desde los 2 euros en Luxemburgo o Grecia a los 7 en el Reino Unido o los países nórdicos. Tras la ampliación en mayo próximo, el precio más bajo en alguno de los nuevos incorporados será de 0,5 euros. En Francia, el precio medio del tabaco rubio ronda los 5 euros tras la reciente subida, mientras en España oscila entre los 2,50 en el estanco y los 2,65 en otros centros.

De otra parte, la Comisión Europea ha enviado a 20 entidades productoras y transformadoras del sector tabaquero español otros tantos pliegos de descargo por haber incurrido presuntamente en connivencia para la fijación de precios entre 1996 y 2001. Fuentes del sector estimaban que las sanciones económicas podrían llegar hasta los 20 millones de euros, pero desde la Comisión se señaló que ni las sanciones están fijadas ni pueden conocerse de antemano.