"El PP teme que el modelo del tripartito sea exportable a España"
Pregunta. Un mal inicio tanta polémica en sólo tres semanas de Gobierno tripartito, ¿no?
Respuesta. De entrada, sí. Pero superaremos esta fase tras el nombramiento del director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV). Es necesario que en estos cuatro años modifiquemos las leyes para que quede claro que estos nombramientos deben estar desgubernamentalizados y tienen que responder a criterios de independencia y profesionalidad.
P. ¿Qué ha fallado entre ustedes?
R. Ha habido desajustes de comunicación y discrepancias lógicas. Lo que más lamento es que ha dado una impresión de un reparto de poder, lo que no responde a la realidad. Debemos aprender a administrar con prudencia las discrepancias y que éstas no abran brechas.
"El Gobierno debe aprender a administrar con mayor prudencia las discrepancias"
"No fuimos desleales, simplemente conocimos el nombre de Ferrús por la prensa"
"Hemos roto la dinámica de dos nacionalismos -el del PP y el de CiU- que se retroalimentaban"
P. Este Gobierno parece repetir lo que ustedes mismos consideraban defectos en los Ejecutivos de CiU. Peleas entre partidos, y lo que antes eran cuestiones de familiares entre padres e hijos ahora son entre hermanos.
R. Los familiares que se han nombrado han sido designados bajo responsabilidad de los consejeros respectivos porque creen que pueden hacerlo bien.
P. Jordi Pujol también entendía que su hijo Oriol lo podía hacer bien y ustedes en la oposición no ahorraban críticas.
R. Nosotros criticábamos que, en los Gobiernos de CiU, las ramificaciones entre interés público y privado fueran una constante, un entramado. Eso no pasa ahora. Se podrá discutir sobre nombramientos de hermanos, pero Manel Nadal es una de las personas que más sabe de infraestructuras y Ernest Maragall lleva mucho tiempo en política. Y quiero creer que el nombramiento de Apel.les, el hermano de Carod, responde a que él lo ve como la persona más indicada.
P. Ustedes tampoco se libran de este festival de acusaciones. Les han llamado desleales desde cierta prensa porque una diputada de Iniciativa per Catalunya, Dolors Comas, expresó públicamente su oposición a la voluntad del presidente Maragall de nombrar a Jaume Ferrús director general de la radiotelevisión pública.
R. Es verdad, emitimos un comunicado, pero es que nunca, nunca, desde la toma de posesión había habido ninguna conversación con Maragall en la que se nos hablara de Jaume Ferrús. Su nombre apareció en los medios de comunicación y nuestra diputada consideró que el cambio en la CCRTV no se veía con Ferrús. No ha habido, por tanto, deslealtad.
P. ¿Usted cree que, en algunas actuaciones, el presidente Maragall está haciendo maragalladas. Es decir, utilizando formas excesivamente presidencialistas, por ejemplo, en el caso de Ferrús?
R. No quiero hacer juicios de intenciones. Maragall creía que su candidato era el mejor e hizo bien en convocar al Consejo de Administración para que tomara una decisión. En este proceso nos ha faltado cultura de la coalición y espero que avancemos en ello.
P. Él reunió al consejo, pero le dio sólo dos candidatos.
R. Lo que pasó entre el presidente Maragall y el consejo lo saben ellos.
P. ¿Existen secretos de confesión en un Gobierno laico y de izquierdas?
R. No lo sé. En todo caso, yo no estaba presente y la competencia es del Consejo de Administración.
P. Esquerra teme ser arrinconada por los socialistas en el Gobierno. Ustedes tienen el Departamento de Medio Ambiente y Vivienda, pero el Instituto Catalán del Suelo está en manos de Política Territorial.
R. Se está negociando. Vivienda debe tener una parte de suelo.
P. Pero, ¿se sienten acorralados?
R. No. Tenemos un problema en Vivienda, sí. Pero es normal que con la reestructuración de consejerías haya puntos conflictivos. No le doy más importancia.
P. ¿Nada de tensión, pues?
R. No, no hay ningún clima de tensión. Las izquierdas somos conscientes de que tenemos una oportunidad histórica y hace falta crear complicidades, ilusionar a los ciudadanos de Cataluña.
P. Ustedes primero dicen que quieren recortar los gastos en un 2% y luego anuncian contrataciones de médicos y maestros. ¿Esto va a ser la multiplicación de los panes y los peces?
R. La ampliación de 1.400 plazas de maestros responde a las necesidades de crear aulas. No podemos en septiembre inaugurar aulas sin maestros. Queremos reducir el gasto corriente, habrá una reducción sustancial de altos cargos porque Cataluña necesita inversión.
P. Pero las medidas de choque, las medidas sociales, no acaban de verse.
R. Algunas de las medidas que he dicho -médicos, maestros-, se han hecho, pero como son cosas positivas salen un día en los medios y ya está.
P. En lo que respecta a su cartera, ¿cuándo comienzan los trabajos de reforma del Estatut?
R. En el primer pleno de febrero constituiremos la ponencia. Estoy satisfecho de que el PP y el señor Piqué manifestaran su voluntad de participar. Luego, el plan de trabajo debe decidirlo el Parlament. Queremos que lo apruebe el Congreso de los Diputados y que sea lo más unitario posible en Cataluña y con un proceso de participación social y de pedagogía en el resto del país. No aceptamos que en un mes y medio haya una reforma del Estatut para decidir las alianzas en el Congreso de los Diputados.
P. El tripartito catalán se ha convertido en blanco del PP.
R. Sí. Representa un estilo distinto que es la antítesis del PP; por eso somos su diana. Debo decir que, a pesar de todo, Mariano Rajoy, el candidato de ese partido, es el más prudente de todos. Espero que no siga la estela de las barbaridades de Aznar, Arenas, Zaplana...
P. ¿Tal vez el PP tema que su modelo sea exportable?
R. Sí lo temen, sobre todo ahora que el PP se ha quedado aislado y sus futuras alianzas se prevén difíciles. El tripartito catalán rompe una dinámica que le interesaba mucho a Aznar: la de dos nacionalismos conservadores que se retroalimentaban, el de Convergència y el del Partido Popular. Además, el tripartito hace una propuesta de reforma de Estatuto en el sentido de cambio en el modelo de Estado. En la transición, el modelo de Estado resultante no hubiera sido posible sin el concurso de las izquierdas catalanas y ahora debe seguir adelante, debe evolucionar, como se pide desde Cataluña o desde Andalucía. El tripartido propone la superación del actual modelo y puede ser punto de referencia de muchas comunidades autónomas.
P. ¿Entrará CiU en el Gobierno catalán si en Madrid apoya a un Ejecutivo del PSOE?
R. Esto lo descarta el tripartito y estoy seguro de que también lo hace el propio José Luis Rodríguez Zapatero. Mire, el número de diputados de Izquierda Unida, del Partido Nacionalista Vasco, del Grupo Mixto, será muy superior a los de CiU, que sufrirá un retroceso. Quien puede dar la mayoría a Zapatero son las fuerzas progresistas, no CiU. CiU debe redefinir su situación política en Cataluña, y no es fácil porque no encontrará el espacio con estos gestos de oposición radical. El gran objetivo, no sólo para España, sino para Cataluña, es crear una mayoría de progreso que no cuente con el PP.
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