Los inmigrantes envían a México 14.000 millones de dólares al año

La progresiva legalización laboral de mexicanos indocumentados en EE UU, cerca de cinco millones, es "interesante" y el resultado del "programa que venimos trabajando, el presidente Bush y el presidente Fox, desde antes de que fuéramos presidentes formales de nuestros respectivos países", declaró ayer Fox, que, lógicamente, evitó aludir al evidente componente electoral de la flexibilización dispuesta por la Administración norteamericana. Los dos mandatarios eran gobernadores de Tejas y Guanajuato antes de ganar la presidencia en 2000.

Fox y Bush abordaron ayer, telefónicamente, la legalización de indocumentados, que podrán conseguir contratos legales de trabajo de hasta seis años, y el desarrollo de la Cumbre Extraordinaria de las Américas, que comienza el lunes en la ciudad mexicana de Monterrey y analizará, entre otros temas, los problemas migratorios. Para México el asunto es fundamental. El país recibió durante 2003 cerca de 14.000 millones de dólares en remesas de sus inmigrantes en EE UU. El grueso de la cuantía procede de los indocumentados.

De acuerdo con las estadísticas, residen en EE UU más de ocho millones de personas nacidas en México y cerca de 20 millones de origen mexicano. Las remesas acumuladas entre enero y noviembre de 2003 superaron en un 35,34% a las del mismo periodo de 2002. México y EE UU comparten una frontera de 3.200 kilómetros con 310 millones cruces anuales. Las autoridades norteamericanas deportan 1,5 millones de personas al año, un promedio de 5.000 diarias, por su frontera con México.

Tratando de ayudar a sus emigrantes, los consulados mexicanos en EE UU emitieron, desde marzo de 2002, cerca de 900.000 matrículas consulares a compatriotas residentes en este país. El documento les permite obtener el carné de conducir y el acceso a servicios bancarios para enviar remesas. La matrícula consular es aceptada por 32 Estados norteamericanos y 160 entidades bancarias.