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CUMBRE DE BRUSELAS | La defensa

El Consejo endurece el control de la inmigración

Gabriela Cañas

Coordinar mejor los controles fronterizos exteriores, mejorando los sistemas en los países que se sumarán a la UE, vigilar más estrecha y conjuntamente la llegada clandestina de inmigrantes por mar, incluir datos biométricos en los visados y, en el futuro, en los pasaportes y repatriar a los sin papeles con más rapidez son las medidas aprobadas ayer por los líderes europeos en Bruselas.

En el documento suscrito por el Consejo Europeo no hay una sola medida destinada a la gestión e integración de esa inmigración equivalente a mano de obra que Europa necesita según todos los informes. Pese a ello, el presidente de turno del Consejo, Silvio Berlusconi, dijo ayer: "Queremos flujos migratorios apropiados a la capacidad de acogida de la UE de modo que puedan venir y establecerse con todos los derechos civiles y plena ciudadanía". Pero acto seguido Berlusconi, más acorde con las disposiciones adoptadas, añadió: "Hemos tomado medidas para protegernos de la inmigración clandestina y para luchar contra las organizaciones criminales que esclavizan a los inmigrantes. También hemos reforzado la cooperación judicial y policial, dando un mayor papel a Europol".

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La creación de la agencia de control de fronteras y la de los visados con datos biométricos (huellas dactilares y datos físicos) son las medidas más concretas que se van a poner en marcha. Durante la presidencia italiana ha sido imposible sacar adelante, como pone de manifiesto el propio documento final del Consejo, las directivas sobre requisitos y procedimientos de asilo, que han generado un profundo debate: dentro de la UE porque países como Alemania y Austria se niegan a ceder en la ampliación de derechos laborales a los refugiados, y fuera porque el proyecto de elaborar una lista de países seguros, cuyos ciudadanos serían automáticamente rechazados al pedir asilo en Europa, ha sido considerado contrario a la Convención de Ginebra por el comisionado para los refugiados de la ONU, Ruud Lübbers, y por la organización Amnistía Internacional.

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Sobre la firma

Gabriela Cañas
Llegó a EL PAIS en 1981 y ha sido jefa de Madrid y Sociedad y corresponsal en Bruselas y París. Ha presidido la Agencia EFE entre 2020 y 2023. El periodismo y la igualdad son sus prioridades.

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