Añorando los ochenta
Reediciones y reuniones de viejos grupos devuelven a la actualidad los años del llamado 'rock radikal' vasco
Ya han pasado 20 años desde la celebración de aquel festival anti-OTAN en el que se acuñó la etiqueta de rock radikal vasco. Tiempo suficiente para que muchas cosas pasen al olvido. Sin embargo, tal y como se puede comprobar en la actual Feria de Durango, la industria musical y los programadores de conciertos han decidido volver la vista a los convulsos y fértiles años ochenta, un periodo en el que la ilusión superaba muchas veces a la calidad, un tiempo presidido por una frescura que hoy se añora entre la mayoría de los lanzamientos. Sea por falta de nuevos talentos, por ganas de sacar provecho al afán consumista en tiempos de Navidad o, simplemente, por nostalgia, lo cierto es que muchas reediciones, homenajes y reuniones de antiguos grupos recuperan aquel tiempo pasado.
Los que han vuelto con más pujanza son Tijuana In Blue. Tras grabar tres elepés, un mini y dos compartidos entre 1985 y 1992, el grupo pamplonés colgó los instrumentos. Pero en febrero de este año se reunió para celebrar el 20º aniversario de la emisora Eguzki Irratia y no ha parado hasta la muerte de Eskroto, su cantante, ex Kojón Prieto y Los Huajolotes, el pasado 30 de noviembre.
La banda ha ofrecido en 2003 o numerosos conciertos y Gor Diskak acaba de editar Antes de perder el riego, un compacto grabado este año, en directo, en Huesca. El septeto aún exhibe en él espíritu punk, temas jaraneros con guiños funk y letras jocosas y fáciles de corear, que lo mismo hablan del poteo que ensalzan la figura de Maki Navaja o se constituyen en himnos futboleros. Con el disco y la gira de reencuentro con su público, Gor también ha editado un DVD con imágenes añejas y la actuación que Tijuana ofreció el pasado 6 de junio en la sala Razzmatazz de Barcelona.
En el capítulo de regresos destaca también la reunión de Las Vulpes, quienes, 20 años después de provocar gran escándalo con la canción Me gusta ser una zorra, han retomado los instrumentos para hacer una pequeña gira y grabar el correspondiente disco en vivo. Para empezar han celebrado un multitudinario homenaje a su fallecida batería, en compañía de Eskorbuto y M.C.D., otras dos bandas pioneras en trasladar la actitud antisistema y la estética del punk al País Vasco.
En directo está grabado también Bazen (Metak), un CD y DVD que resucita a BAP!!, banda de rock y hardcore, aunque abierta a toques funk, formada en el verano de 1983. El disco recoge la última actuación ofrecida por el grupo, en el gaztetxe de Andoain en 1996, y otros cuatro cortes grabados en Hendaya tres años antes.
Dro East West acaba de editar Un camino de piedras, disco homenaje a Barricada. Y en el capítulo de reediciones se lleva la palma Zarama, ya que Elkarlanean, que también ha recuperado la obra completa de Errobi, ha reunido en una caja seis discos que el grupo de Santurtzi grabó entre 1982 y 1994. Una buena oportunidad para conocer casi toda la producción de un conjunto que se considera precursor del rock en euskera (al menos en la Margen Izquierda) y cuyo repertorio incluye clásicos autóctonos como Gasteizko gaua, Zarameren erdian e Iñaki, zer urrun dagoen Kamerun.
Además, el lanzamiento de Zarama 1982-1994 coincide con la edición en papel de Flores en la basura. Los días del rock radikal, un texto que Roberto Moso, cantante del grupo vizcaíno, ya colgó hace un año en Internet. Con esta colección de anécdotas Hilargi Records inaugura la Colección Zirkus, con la que pretende mostrar "la trastienda del rock".
El pasado en el presente
En los ochenta también pegaron fuerte grupos como Hertzainak, Kortatu o La Polla Records. Aunque sus nombres ya no figuran en los carteles, algunos de sus componentes siguen en activo. Es el caso de Gari, Iñigo Muguruza, Tonino Carotone, Evaristo (ahora en The Kagas) o Fermin Muguruza, que en la gira Komunikazioa Tour que realiza al frente de su Kontrabanda recupera canciones de su paso por Negu Gorriak y Kortatu.
Todas las grabaciones de Hertzainak y de Itoiz fueron rescatadas también en dos cajas hace dos y tres años, respectivamente, lo que indica que el interés por los ochenta no es tan reciente. ¿Se echan demasiado de menos esos años? "Quizá sí. Y en ese sentido puede ser preocupante, ya que igual significa que en el presente no hay dónde mirar. Ahora la gente tiene más medios, más instrumentos y ayudas, pero entonces se produjo un cambio muy grande", contesta categórico Roberto Moso.
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