La policía francesa detiene a Susper, el jefe etarra que propició la caída de 70 'reclutas'
Fernández Iradi estaba "de segundo" en el 'aparato militar', dirigido ahora por Gorka Palacios
El dirigente del aparato militar de ETA Ibón Fernández Iradi, Susper, fue detenido a las 18.30 de ayer en un piso de Mont-de-Marsan (en el departamento francés de Las Landas), donde estaba escondido junto a un hombre y una mujer, que también fueron detenidos sin oponer resistencia, aunque estaban armados. La detención del que fuera jefe de los comandos, ahora dirigidos por Gorka Palacios, se produce casi un año después de que huyera de la comisaría de Bayona, dejando tras de sí un sinfín de documentos que han permitido la detención de 70 supuestos nuevos reclutas de ETA.
Susper había sido localizado el martes pasado durante una operación conjunta de la Policía Judicial francesa y la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía. Fernández Iradi, que el lunes iba a cumplir 32 años, fue identificado por un equipo policial que había establecido varios dispositivos de vigilancia en diferentes localidades.
Susper, nacido en San Sebastián y de 1,80 metros de estatura, fue detenido junto a otro hombre, cuya identidad no había sido facilitada anoche (aunque posiblemente se trate de Francisco Abad Urquijo), fue detenido por agentes de la División Nacional Antiterrorista (DNA) en un garaje (donde acababan de aparcar un coche lleno de gasolina), mientras la mujer, posiblemente la francesa Garazi Aldana, se encontraba en el citado piso de Mont-de-Marsan (uno de los principales nudos de comunicaciones de Las Landas), cercano a la citada lonja.
Más documentación
La policía ha registrado la vivienda y el garaje, en los que han sido hallados armas, documentos de identidad falsos y documentación interna de ETA, en papel y soporte informático. Las identidades de los tres quedarán plenamente confirmadas cuando Francia remita a España la ficha decadactilar de cada uno de los detenidos.
El ministro del Interior, Ángel Acebes, explicó anoche que la operación le fue comunicada telefónicamente por su homólogo francés, Nicolás Sarkozy, pocos minutos después de ejecutarse. "Susper se había reincorporado a la dirección del aparato militar, a la jefatura de los comandos, seguramente en tareas compartidas con otra persona", señaló Acebes, quien agregó que la operación, que aún no ha terminado, "es de gran alcance y de gran importancia". El detenido, efectivamente, se había reintegrado en el aparato militar, pero había pasado a ser el segundo de a bordo, bajo el mando, supuestamente, del etarra Gorka Palacios Alday, de 29 años, según indicaron ayer fuentes de la lucha antiterrorista.
La detención es fruto de un año de investigaciones conjuntas, que se iniciaron el 22 de diciembre de 2002, cuando se fugó por un respiradero de la celda de la comisaría de Bayona utilizada habitualmente para que los conductores ebrios duerman la mona. Susper había sido detenido tres días antes en una vivienda de la localizad ostrera de Arcachón junto a otras ocho personas. El etarra, que perteneció al comando Donosti entre el año 2000 y agosto de 2001, acababa de suplir en la jefatura de los comandos a Juan Antonio Olarra Guridi y Ainhoa Mujika Goñi, detenidos justo dos meses antes.
El ahora detenido dejó tras de sí varias cajas de documentos, especialmente en un piso del que también disponía en Tarbes. Parte de los papeles pertenecían a los anteriores jefes de los terroristas. "Casi no le había dado tiempo a revisarlos y parece que ni él mismo sabía todo lo que contenían esos documentos", según fuentes de la lucha antiterrorista. Entre esos papeles figuraban datos sobre decenas de personas presuntamente vinculadas a la organización, sobre todo a los aparatos de captación.
Acusado de 18 atentados
La policía española ha podido exprimir durante el último año dicha documentación, lo que ha permitido detener a 70 supuestos nuevos reclutas de la banda. Susper había confiado en que los agentes no pudieran descifrar el lenguaje en clave en el que figuraban dichos nombres. "Tranquilos, todo está en clave", comunicó por carta a dirigentes etarras encarcelados.
Susper, además, cuenta con un abultado historial terrorista, en el que acumula acusaciones por su participación en, al menos, 18 atentados. Por ejemplo, se le considera uno de los autores del atentado en el que murió el agente de la Ertzaintza Iñaki Totorika (en Hernani, el 8 de marzo de 2001); se cree que participó en la colocación de una bomba en el cementerio de Zarautz, que ETA pretendía hacer estallar el 9 de enero de 2001 durante un homenaje que el Partido Popular iba a homenajear a un concejal asesinado; y también se sospecha que facilitó la información que permitió a dos pistoleros asesinar en un bar de Tolosa a Juan María Jáuregui, en el año 2000.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Francisco Abad Urquijo
- Detención terroristas
- Cúpula ETA
- Garazi Aldana
- Coalición antiterrorista
- Gorka Palacios Alday
- Ibon Fernández de Iradi "Susper"
- Operaciones antiterroristas
- Francia
- Política antiterrorista
- Europa occidental
- Gente
- Lucha antiterrorista
- Europa
- ETA
- Grupos terroristas
- España
- Terrorismo
- Política
- Sociedad