Un centenar de propietarios de fincas se suma al plan del lince
La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, anunció ayer en Jaén que su departamento ha firmado ya un centenar de convenios con propietarios de fincas próximas a Doñana y Sierra Morena para la recuperación de la población del lince, que es el felino cuya supervivencia está más amenazada en la Península Ibérica. Los acuerdos consisten en la reintroducción de conejos, puesto que se trata del principal alimento del lince, para contribuir así a la supervivencia del felino.
La Consejería anunció la pasada primavera, al presentar el plan andaluz del lince, que serían 600 los convenios con los dueños de las fincas. El objetivo era aumentar la superficie potencial en la que se pueda desarrollar el lince en Andalucía a 80.000 hectáreas que, unidas a los montes públicos de Sierra Morena y Doñana, suman un total de 120.000 hectáreas.
Fuensanta Coves dijo que la población de lince en Andalucía es de algo menos de 300 ejemplares en las Sierras de Andújar y Cardeña y 56 en Doñana, contando los 30 nacidos en Andújar y los seis en Doñana en el último año.
Tres ejemplares muertos
Tres linces han sido localizados muertos en lo que va de año en Andalucía, en los núcleos de Doñana y Andújar-Cardeña, además de otros dos malheridos y que se han podido recuperar, todos ellos como consecuencia de atropellos y de prácticas ilegales de caza. El último de los ejemplares fallecidos es un macho de unos 20 meses que fue localizado el miércoles en una finca de Andújar (Jaén), donde apareció en avanzado estado de deshidratación y con las patas cortadas a las misma altura como consecuencia de un cepo. La consejera de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Fuensanta Coves, dijo sentirse "profundamente decepcionada" por el último suceso y lo calificó como un acto de "caza indiscriminada".
Coves admitió que las Administraciones no son capaces de acabar con los cepos, "una práctica ilegal", dijo, y que supone una infracción muy grave castigada con entre 60.000 y 300.000 euros.
La consejera, que mostró las fotografías del animal muerto, trasladó al Ayuntamiento de Andújar la denuncia pública de Ecologistas en Acción sobre la proliferación de urbanizaciones ilegales en la zona donde murió el lince.
Para la consejera la salvación de esta especie depende en gran medida de que los ciudadanos "se conciencien y colaboren" con este felino, único en el mundo, para el que ahora se diseña un programa de cría en cautividad para garantizar su supervivencia.
Coves firmó ayer en Jaén convenios con 11 municipios que realizarán diagnósticos ambientales dentro del programa Ciudad 21. Posteriormente, presentó a las organizaciones agrarias el manual sobre buenos usos de gestión ambiental en el sector oleícola que ha elaborado la consejería.
