Las empresas textiles con empleo estable podrán aplazar las cotizaciones sociales

Tras meses de negociaciones, empresarios y sindicatos del textil han alcanzado un acuerdo con el Gobierno que persigue suavizar el amargo impacto de la liberalización total en 2005 de un sector que en España emplea a 208.000 personas y que, sin medidas de apoyo, podría enfrentarse a una sangría de casi 100.000 puestos de trabajo. El acuerdo tripartito, que se rubricará la próxima semana, prevé medidas novedosas como la posibilidad de que las empresas que atraviesen una crisis aplacen o fraccionen los pagos de las cotizaciones a la Seguridad Social, y también que puedan suspender contratos de trabajo mediante expedientes de regulación de empleo de tramitación rápida.

Los sindicatos batallarán ahora porque los trabajadores afectados por las suspensiones, que sólo podrán durar tres meses durante los que recibirán formación, perciban el 100% de su salario neto.

Si finalmente la experiencia acaba en un proceso de extinción de empleo, el Ministerio de Trabajo se compromete a reponerles las prestaciones por desempleo. Pero sólo podrán beneficiarse de estas medidas las empresas cuya plantilla no supere el 20% de contratos temporales. De 11.000 compañías, cumplen el requisito 6.000.

Ante el plan, que prorroga de 2004 a 2007 el programa de apoyo al I+D en el sector, el presidente de la patronal, Joan Canals, y el responsable del sector de CC OO, Joaquim González, se felicitaron de "el Gobierno se haya decidido a hacer política industrial" y de la "utilidad" de la batalla conjunta entre sindicatos y patronal.