Mas propone una ley que blinde zonas no urbanizables del litoral catalán

El candidato de CiU, Artur Mas, propuso ayer una nueva ley que blinde zonas del litoral catalán que no sean urbanizables para evitar "que los Ayuntamientos puedan tener un día la tentación de urbanizarlos" y atraer, así, a "turismo de calidad". Mas hizo la propuesta en una visita a la desalinizadora de Blanes y en un día en que volvió a alertar del "riesgo" de un pacto entre PSC e ICV, porque frenaría "el equilibrio territorial y el progreso económico de Cataluña" y resultaría un Gobierno "hipotecado". Las críticas más duras de Mas fueron para ERC, partido al que acusó nuevamente de no tener "cultura de gobierno".

Mas insistió en que esta propuesta va en la línea de atraer un "turismo de calidad". Una medida mucho más efectiva, según el candidato de la federación nacionalista, que la aplicación de una ecotasa, que no se plantea. La razón, la hipotética pérdida de competitividad que a su juicio sufriría la industria turística catalana. La ecotasa, dijo, "no sirve para casi nada. Bueno sí, para una cosa. Sobre todo para despistar a los clientes y a los mercados". Las polémicas en torno al impuesto ecológico, dijo, hacen que "los competidores de todas partes aprovechen el debate para llevarse ellos el gato al agua".

La ley que Mas prometió impulsar en caso de poder formar Gobierno se podría aplicar, explicó el candidato, sobre 53 espacios situados en 39 municipios del litoral catalán. Los espacios ocupan un total de 54 kilómetros, el 8,16% de la costa catalana, y entre ellos citó las Dunas de Roda de Berà (Tarragona) y el suelo no urbanizable de la bahía de Roses (Girona). Mas aseguró que la ley "no contradice en absoluto" la Ley de Costas del Gobierno central.

"Gobierno hipotecado"

Mas volvió a insistir en un par de cuestiones que ha venido repitiendo a lo largo de la campaña, una dirigida a ERC y otra a una posible coalición de izquierdas en el Gobierno de la Generalitat. Primero volvió a acusar a ERC de no tener "cultura de gobierno". Y alertó del "riesgo" de un pacto entre los socialistas e ICV, una idea que la formación nacionalista machaca ante los auditorios de fuera del área metropolitana de Barcelona, los agricultores y los empresarios. El candidato se preguntó: "¿Cómo pueden garantizar que habrá progreso económico en Cataluña, que pasa por una actuación sobre el territorio, si Iniciativa ya ha dicho que lo piensa bloquear casi todo? No quieren que haya líneas eléctricas, no quieren que haya centrales nucleaes, no quieren que haya determinadas infraestructuras de carreteras, no quieren que haya determinados túneles... ¿Qué se hará entonces en Cataluña?" Y remató: "Un gobierno así es un gobierno absolutamente hipotecado". El líder convergente acusó también al candidato popular, Josep Piqué, de "introducir falsedades en el debate político" por decir que Mas pactaría con ERC para seguir aferrado al poder.