Las ostras y las almejas crudas, vías preferentes de contagio
En 1968, la mitad de los estudiantes y profesores del Colegio Elemental Bronson de Norwalk, una ciudad de 16.000 habitantes de Ohio, padecieron una gastroenteritis producida por un agente desconocido. La tercera parte de las personas que convivían con los enfermos también sufrieron los síntomas (vómitos y diarrea). Cuatro años después se descubrió la causa: un nuevo tipo de virus al que se dio el nombre de la localidad. Se sospecha que el agente estaba en alguno de los alimentos que se sirvieron con el menú escolar.
Desde entonces se ha identificado el Norwalk o alguna cepa relacionada (los llamados norovirus) en miles de brotes de infecciones gastrointestinales en todo el mundo. Expertos estadounidenses calculan que están en el origen de las dos terceras partes de las enfermedades de este tipo de origen vírico del mundo.
El episodio es rápido (dura dos días) y leve (remite solo y no deja secuelas) por lo que es seguro que muchos episodios de dolencias intestinales se hayan debido al Norwalk o a otros virus de su familia y no se hayan identificado, afirma el presidente de la Sociedad Española de Epidemiología, Ildefonso Hernández.
Residencias y lujo
Desde entonces, los colegios y las residencias han sido uno de los refugios preferidos del virus. En España se producen varios brotes cada año (uno de los últimos, en una residencia geriátrica de Santa Fe, Granada, según publicó en abril la Revista Española de Salud Pública).
Pero al Norwalk le gusta el lujo. Una de sus vías de contagio favoritas son las ostras y las almejas cuando se toman crudas, explica el jefe del servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal, Santiago Moreno. Y volvió a las páginas de los periódicos cuando el año pasado empezó a atacar a los viajeros de los cruceros, probablemente porque se propague a través de sus sistemas de agua.
Entre sus víctimas están el Ocean Princess, un barco de lujo que transportaba en mayo a 2.053 pasajeros desde Vancouver a Seward (Alaska). En el Caribe, más de mil pasajeros de tres cruceros, el Fascination, el Amsterdam y el Magic enfermaron en menos de tres meses durante sus vacaciones.
La relación entre el virus y los viajes por mar es tan frecuente que la Organización Mundial de la Salud y el Centro del Control de Enfermedades de Atlanta, responsable científico del Departamento de Salud de EE UU, han elaborado documentos sobre cómo construir los barcos y cómo manejar la enfermedad a bordo.
