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Guipúzcoa dedica por vez primera más dinero a gasto social que a carreteras

Guipúzcoa y Vizcaya aumentarán un 8% las aportaciones forales a los ayuntamientos

Mikel Ormazabal

El diputado general de Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri, aseguró ayer que el presupuesto foral para 2004 destinará 208 millones de euros a gastos sociales, una partida que supera "por primera vez" a la de carreteras (158 millones), aunque en este último capítulo no incluyó otros 82 millones que se obtendrán de los peajes y se invertirán en las autopistas. La Diputación gestionará 566,8 millones, un 7,7% más que este año. El aumento de la previsión recaudatoria permitirá que tanto en Guipúzcoa como en Vizcaya la aportación foral a los municipios crezca cerca del 8%.

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Txabarri presentó ayer las cuentas de la Diputación para el próximo ejercicio como una competición entre el gasto social y el de carreteras. El mandatario foral se jactó de que, en esa pugna, la atención social sale victoriosa "por primera vez" sobre inversión en viales. Según su planteamiento, los departamentos sociales dispondrán de 208 millones (el 36,75% del presupuesto), mientras que las infraestructuras viarias se llevarán 158 millones (el 27,8%).

Sin embargo, Txabarri no contabilizó en el presupuesto de carreteras los 4,2 millones que otro departamento dedicará a transportes, ni los 82 millones que se prevé recaudar en 2004 de los peajes y que serán gestionados en su totalidad por las sociedades forales Bidegi y Bidelan para realizar obras y mejoras en las autopistas Eibar-Vitoria y Bilbao-Behobia. Tampoco reseñó que el gasto corriente de los departamentos sociales duplica al de carreteras.

El proyecto presupuestario, aprobado ayer por el Consejo de Diputados y tramitado a continuación en las Juntas Generales, prevé ingresar 3.230 millones, de los que la Diputación dispondrá de 566,8 millones, una vez descontados los compromisos institucionales (pago del Cupo y aportaciones al Gobierno y a los ayuntamientos).

Ni ruptura ni continuismo

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Con estos recursos, explicó Txabarri, su gabinete ha confeccionado unas cuentas que "no son rupturistas, ni continuistas" con el anterior Ejecutivo foral. Remarcó su carácter social, el impulso a la regeneración de Pasaialdea (4 millones), el apoyo a la cultura de la innovación y el conocimiento (30 millones) y a la lucha contra el fraude fiscal (1,1 millones), entre otras actuaciones.

En el apartado social, la Diputación tiene previsto aumentar un 27% la dotación para la renta básica, destinar 11 millones a la inserción y empleo de colectivos excluidos, 33 millones en prestaciones a colectivos desfavorecidos (11.487 beneficiarios) y dedicar una partida de 0,5 millones para "fomentar la idea de la reconciliación en la sociedad guipuzcoana".

Txabarri manifestó que se trata de "una propuesta abierta", con "márgenes de mejora" durante la negociación que abordará la próxima semana con los grupos de la oposición.

La previsión de un aumento de la recaudación por impuestos incidirá positivamente en la asignación reservada a los ayuntamientos. En Guipúzcoa, el Fondo Foral de Financiación Municipal crecerá un 8,43% hasta los 302 millones que se repartirán los 88 municipios de la provincia. Los ayuntamientos vizcaínos percibirán 524,8 millones de la Diputación, con lo que la aportación vuelve a crecer tras disminuir en 2002. El incremento rondará el 8%, informa Alberto

Uriona.

En el último lustro, los ayuntamientos de Vizcaya habían tenido espectaculares incrementos en los fondos que recibían de la institución foral: de los 247 millones de euros de 1996 se pasó a los 521 millones en 2001. Al año siguiente, esta partida disminuyó hasta los 485 millones debido al descenso en la recaudación. Este monto se mantuvo en las cuentas de 2003, debido a que los presupuestos han sido prorrogados por la falta de una mayoría política en las Juntas Generales. La financiación municipal, según explicó ayer el diputado vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga, supondrá casi el 10% del presupuesto bruto (5.260 millones).

[El alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, admitió ayer que tendrá dificultades para renovar su presupuesto, aunque recalcó que los proyectos de la ciudad "están garantizados", aludiendo a la más que probable prórroga de las actuales cuentas].

Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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