Las familias de Castellón y Alicante ahorran más que las de Valencia

Las familias de Castellón y Alicante destinan al ahorro un porcentaje de sus ingresos superior al que reservan las familias de Valencia, según los resultados de un estudio sobre la evolución de las cuotas de ahorro en España entre 1995 y 2001 difundido ayer por la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas). El trabajo también refleja un descenso sostenido del porcentaje de ingresos destinados al ahorro desde 1995.

Los vecinos de la provincia de Castellón son los más propensos al ahorro en comparación con los residentes en Alicante y Valencia. Un trabajo elaborado por Julio Alcaide Inchausti, estadístico que fue galardonado con el premio Rey Jaime I de Economía en 1991, revela que las familias de Castellón reservaron un 15,25% de los ingresos que acumularon en 2001 en distintas modalidades de ahorro desde la compra de vivienda hasta los planes de pensiones, los depósitos a plazo o la compra de acciones.

El dato supone un ligero repunte del ahorro familiar en Castellón respecto a los dos años anteriores, 1999 y 2000, pero se mantiene muy por debajo de la tasa de ahorro próxima al 19% que reservaban las familias de Castellón en 1995.

Las familias de Alicante reservan algo menos de sus ingresos a través de las diferentes modalidades de ahorro, pero en 2001 mantenían a buen recaudo un porcentaje de sus ingresos que superaba el 14,2%.

La tasa de ahorro familiar también ha seguido una senda descendente en la provincia de Alicante desde 1995, cuando el porcentaje de ingresos que reservaban las familias superaba el 17,1%.

Distancia

Resulta llamativa la distancia histórica de la tasa de ahorro de las familias de Valencia respecto a los datos que arrojan Castellón y Alicante. Los valencianos apenas reservaron el 13% de la renta familiar disponible en 2001, un indicador que acumula los distintos ingresos que registra cada unidad familiar. En 1995, el porcentaje de ingresos que ahorraban las familias residentes en la provincia de Valencia rondaba el 14,6%, pero se ha mantenido por debajo del 14% durante los seis años siguientes con ligeros descensos consecutivos hasta 2001.

Juan Alcaide apunta que el ahorro familiar es el indicador más fiable de la propensión al ahorro de las personas físicas. Pero considera también cuotas provinciales de ahorro bruto que incluyen las reservas acumuladas por instituciones públicas y empresas, cuyos indicadores relaciona directamente con el desarrollo económico de cada provincia.

Los datos de ahorro bruto en relación al producto provincial también sitúan a Castellón en el primer lugar con una tasa que rondaba el 30% en 2001. Alicante ocupa un segundo lugar, con una tasa de ahorro bruto en relación al PIB en torno al 26,5%, mientras que Valencia se mantiene a la cola con un índice por debajo del 26%.