La ley de Colegios Profesionales sale adelante sin el apoyo de la oposición
El PP advierte de que puede ser recurrida al Constitucional
El Parlamento aprobó ayer la ley de Colegios Profesionales de Andalucía sin el apoyo de los grupos de la oposición y con la advertencia del Partido Popular de que puede ser recurrida por el Gobierno central ante el Tribunal Constitucional al eximir de la colegiación obligatoria a los profesionales al servicio de las Administraciones públicas, como médicos y enfermeros.
El PP, que ha mantenido un rechazo frontal a la norma, no vio prosperar ninguna de las 26 enmiendas que mantuvo en el debate final. Básicamente las objeciones de los populares se centraron en el artículo 4 de la ley, que dispensa de colegiación obligatoria al personal al servicio de la Administración autonómica, lo que según el portavoz popular, Juan Santaella, puede incurrir en inconstitucionalidad. Para el diputado granadino, que citó los informes elaborados por dos catedráticos de Derecho Administrativo y una reciente sentencia de un tribunal de Cáceres, "las autonomías no pueden eximir de colegiación porque ésa es una competencia del Estado".
Santaella basó el voto en contra de su grupo en que la ley es "mala, precipitada, intervencionista y limita las facultades" de los colegios. Pese a sus inequívocos intentos por provocar una salida de tono del ponente socialista, Santaella no logró ni una descompostura de Juan Antonio Marín Rite. Ni siquiera con la advertencia del recurso al Tribunal Constitucional: "El acudir al Tribunal Constitucional, es decir, el ejercicio de la ley nunca es una amenaza", dijo el socialista.
Marín Rite aseguró que el debate de la ley de Colegios Profesionales está condicionado por "las diferencias conceptuales" de cada grupo, de "ahí que sea tan difícil el entendimiento" y subrayó como lo más importante de la ley el que por primera vez se regule las relaciones entre la Administración y las corporaciones de derecho público.
IU justificó su abstención por una cuestión ideológica ya que este grupo entiende que el ejercicio de cualquier profesión no debe exigir colegiación alguna ni obligatoriedad de pertenencia a un gremio. "No existe el colegio de fontaneros", dijo el portavoz de IU, Antonio Romero.
El diputado del grupo mixto Pedro Pacheco, aun reconociendo que la ley es necesaria, basó su abstención en que es "asfixiante y hay un intencionado intervencionismo por parte de la Administración autonómica".
El pleno aprobó también la ley de creación del Colegio de Logopedas sin ningún voto en contra, pero con las críticas de la oposición por "las prisas" del Gobierno en aprobarla en la recta final de la legislatura.
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