Gobiernos municipales intercambian experiencias digitales en Gijón

El VI Club de Usuarios TAO-Grupo Gedas, que se celebró la pasada semana en Gijón, permitió intercambiar experiencias del gobierno electrónico municipal, soluciones ya implantadas y otras en marcha, y constatar que "la Administración pública está cada vez más enfocada al ciudadano, mejorando los procesos y los modos de relación" con los contribuyentes, según el director general de TAO, Xavier Llinares.

Contaron sus experiencias representantes de los ayuntamientos de Tampere (Finlandia), Weisbaden (Alemania), Southampton (Reino Unido), Madrid (mejor web municipal 2003 de Ciberp@ís), Leganés, Mataró y Gijón.

Päivi Kuusisto, responsable de Internet en la ciudad de Tampere (Finlandia), desarrolla una tarjeta inteligente de doble uso que permitirá acceder a los servicios que presta la Administración pública -por ejemplo, las bibliotecas-, pero también al sector privado. El 70% de los tamperenos son internautas, sobre todo con fines de ocio, correo y banca. Algunos también, para el comercio electrónico y para relacionarse con los políticos locales y expresar sus quejas o propuestas.

En Tampere, con 220.000 habitantes, hay disponibles 140 ordenadores públicos con conexión gratis a Internet. 12 de ellos forman una unidad móvil. El uso es gratuito.

En Wiesbaden, capital del Estado de Hesse (Alemania), la web municipal aloja 5.000 textos y 700 servicios. Entre diciembre de 2001 y julio de 2003 las visitas crecieron de 98.000 a 180.000 mensuales.

En el mes de junio finalizó en Southampton (Reino Unido) la implantación de una tarjeta inteligente, que permite su uso en bibliotecas, autobuses urbanos y otros servicios, pero que persigue sobre todo "integrar a todos los ciudadanos en un único sistema informático de arquitectura abierta", denominado Proyect Smartcities, y que aspira a convertirse en un sistema internacional con usos para el ocio (acceso a piscinas, por ejemplo), la educación, la formación, los transportes y los servicios generales.

La tarjeta se emplea en los colegios para hacer el seguimiento de asistencia de los escolares. También permite incentivar la alimentación sana de los estudiantes mediante un sistema de puntos que se suman o restan según la dieta que los alumnos sigan en los comedores de los colegios y de las universidades.

Sólo en los campus estudiantiles se han repartido 35.000 tarjetas. También es susceptible de utilización como medio de pago electrónico en la hostelería y en las tiendas. "Ahora estamos pensando en habilitar la tarjeta para la votación electrónica y para el pago de peajes de autopista. Se trata de dar más ventajas a sus usuarios", explicó McKean.