"Nada va a ser lo mismo"

Ted Costa empezó todo. Costa,de 62 años, preside El Defensor del Pueblo, un grupo de presión dedicado a combatir a la clase política y vigilar el gasto público. El grupo asegura nutrirse sólo de donaciones privadas y de las cuotas de sus socios, y su presidente declara un salario anual de 38.000 dólares. Costa -que ya hace 25 años lanzó una iniciativa para que el Estado devolviera a los contribuyentes el dinero de los impuestos en caso de superávit- llevaba tiempo dándole vueltas a una idea: el bajísimo nivel de participación que permitió la reelección del gobernador Gray Davis no podía deberse a la apatía. Así que dijo en la radio que estaba recogiendo firmas para deponer a Davis. La reacción fue inmediata. Otros dos grupos le imitaron. Ya con la campaña en marcha, un congresista republicano millonario financió el esfuerzo.

Pregunta. ¿Misión cumplida?

Respuesta. Claro.

P. ¿Qué cambia ahora?

R. Todo. Nada va a ser lo mismo en California. La gente se ha movilizado. Lo de menos es quién ha ganado y quién ha perdido. Lo importante es que hay un antes y un después, que cientos de miles de personas se han implicado directamente en el intento de solución de sus problemas. La gente ha abierto los ojos, y eso es importante para California y para todo el país.

P. ¿Cuál es el problema fundamental de California?

R. Creo que tenemos un sistema político que permite que se gaste más de lo que se tiene. Y eso no puede seguir así.

P. Se le ha acusado de organizar una cruzada contra los impuestos y de no preocuparse de los servicios que dependen de esos impuestos. ¿No hay límites?

R. Claro que hay. Yo no he organizado ninguna cruzada contra los impuestos. Creo que hay que pagar los impuestos que hagan falta, pero no más. Estamos en una cruzada contra el despilfarro, que imagino que tampoco en España gustará.

P. ¿Teme que Schwarzenegger caiga en la lógica que usted combate, gastar y gravar sin control?

R. No sabemos aún lo que va a hacer, pero confío en que haya tomado nota del enfado de la gente.

P. ¿Está cansado?

R. Sí, me voy a tomar una semana de vacaciones.