Un accidente en Montcada provoca un enorme atasco en los accesos a Barcelona

Una colisión entre ocho turismos y un camión a la altura de Montcada i Reixach ocasionó colas de más de 20 kilómetros entre poco después de la seis y casi las once de la mañana de ayer. El accidente se produjo en una de las arterias más concurridas de Cataluña, la C-58, en dirección norte, a las 6.15 horas, y seis personas resultaron heridas, lo que hizo necesario su traslado a diversos centros asistenciales.

El colapso de la vía, que estuvo cerrada durante casi una hora y con paso restringido otra hora más, hizo que se produjera una especie de efecto dominó, coincidente con las horas de máxima afluencia de tráfico en los accesos a Barcelona. Paulatinamente se fueron colapsando las rondas, el nudo de la Trinitat y la Meridiana, siempre en dirección al Besòs, hasta formar un atasco monumental. "Si mañana se produce otro accidente de este tipo", aseguró un portavoz de los Mossos d'Esquadra, "el resultado será el mismo porque no hay vías por las que poder desviar el tráfico a esas horas".

Alfons Perona, del Real Automóvil Club de Cataluña (RACC), explicó ayer que el problema se debió, en su opinión, a dos factores: la falta de un transporte público en condiciones en los accesos a Barcelona y un fallo en la gestión del tráfico. En cambio, dijo, funcionó correctamente la información a los usuarios. El fallo en la gestión se debió a la falta de agentes de la Guardia Urbana en el interior de Barcelona y de los Mossos d'Esquadra en la zona metropolitana limítrofe con la ciudad. Una opinión en absoluto compartida por los responsables de estos cuerpos.

Un portavoz del RACC explicó que, tras el accidente, la C-58 tuvo dos de los tres carriles cortados durante una hora y un solo carril durante dos horas más. La consecuencia fue el atasco en las rondas y en las carreteras que desembocan en el nudo de la Trinitat, especialmente la B-20 y la C-17.El efecto del accidente se agravó, según el RACC, porque se produjo otro accidente menor en la Ronda de Dalt. Los datos facilitados por los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona no coinciden con los de la asociación automovilística. "El accidente se produjo a las 6.15 horas y la carretera estuvo totalmente cerrada hasta las 6.27 horas, cuando se abrió al tráfico un carril. A las 7.05 horas se abrió el segundo carril y a las 8.42 horas quedó restablecida la circulación", aseguró un portavoz de la policía autonómica, el cual también destacó que se dio prioridad a las ambulancias que trasladaron los heridos a los hospitales.

"Es muy fácil", añadió, "criticar la gestión del tráfico cuando no se ha gestionado nunca nada". En su opinión, las colas son inevitables con un accidente de este tipo por la sencilla razón de que no hay vías por las que desviar el tráfico. "La carretera de Cerdanyola no sirve y los túneles de Vallvidrera quedaron colapsados un minuto después. La carretera nacional no hay ni que mencionarla porque a esa hora siempre va llena", precisó.

La Guardia Urbana, por su parte, explicó que tras el accidente se dio información por los 22 paneles de las rondas y por los 14 que hay en la ciudad, además de facilitar datos a través de las emisoras de radio. Las colas, explicó el Ayuntamiento de Barcelona, se produjeron en toda la Ronda de Dalt y en la Ronda Litoral desde la Zona Franca, siempre en dirección al Besòs. Asimismo, quedó llena la Meridiana de salida de Barcelona y hasta Glòries. También quedó afectada la zona de la avenida del Estatut y el túnel de la Rovira. La policía local cortó algunos accesos a las rondas.

Pero la Guardia Urbana de Barcelona no tiene constancia de que se produjera un accidente en la Ronda de Dalt como asegura el RACC. "Sí se produjeron dos averías, una a las 7.45 horas y otra a las 8.51 horas. Ambos vehículos fueron retirados con prontitud".