Un atentado en Colombia causa al menos 10 muertos y 48 heridos

Al menos 10 personas murieron, entre ellas un niño, y 48 resultaron heridas ayer en un atentado con una moto cargada con explosivos en una zona muy concurrida de bares de Florencia, capital del conflictivo departamento de Caquetá, 350 kilómetros al suroeste de Bogotá, según fuentes militares. La acción, ocurrida a las tres de la madrugada (10.00, hora española), ha sido atribuida a la guerrilla de las FARC.

Cuando estalló la moto, cargada con cinco kilos de explosivos, la zona de bares, restaurantes y discotecas de la ciudad de Florencia, la llamada Zona Rosa, se hallaba muy concurrida por ser fin de semana. El vehículo, abandonado en la calle, fue activado a distancia cuando dos policías, que murieron en la explosión, acudieron a retirarla. La onda expansiva provocó la muerte a ocho personas más, entre ellas un niño de nueve años que cuidaba automóviles.

La mayoría de los heridos son civiles, según afirmó el general Luis Ardila, comandante de la Brigada XII del Ejército. "Había tres pubs todavía abiertos y la gente se estaba yendo a sus casas cuando estalló la bomba", explicó Ardila. "Había mucha gente en la calle, oficiales de policía y muchos civiles". Los heridos, de los cuales 15 se encontraban en estado grave, fueron trasladados al hospital María Inmaculada de Florencia. La elevada cifra causó una emergencia en el centro médico, que debió pedir donantes de sangre con urgencia.

La acción ha sido atribuida por las autoridades a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). "Todo indica que el grupo terrorista de las FARC llevó adelante el ataque", dijo Ardila. Por su parte, el alcalde de Florencia, Álvaro Pacheco Álvarez, anunció que se pagará una recompensa de unos 27.000 dólares (23.000 euros) a quien facilite información que permita detener a los autores del atentado. El departamento de Caquetá es una de las regiones con mayor presencia guerrillera y su capital, Florencia -de 120.000 habitantes-, se encuentra cerca de la antigua zona desmilitarizada por el Gobierno y controlada por las FARC durante las fallidas conversaciones de paz, entre 1998 y 2002.

Esta acción es la más grave de las últimas dos semanas, luego de la ocurrida con un caballo cargado de dinamita el pasado 10 de septiembre en la población andina de Chita, en la región de Boyacá, que provocó ocho muertos. En lo que los analistas consideran como un escalón más en la degradación del conflicto en Colombia, en los últimos tres años se han utilizado para cometer atentados burros, cerdos, bicicletas, libros, collares y cadáveres humanos cargados con explosivos.