"Los verdugos de los republicanos han muerto hace poco"

El Parlamento andaluz acordó por unanimidad el pasado jueves reiterar el reconocimiento público a quienes fueron "asesinados" en la Guerra Civil española por defender valores republicanos. También pidió a la Junta que ayude a recuperar los restos de los desaparecidos con un protocolo específico. La socialista granadina Mar Román (32 años) defendió la iniciativa.

Pregunta. ¿Por qué se ha elegido este momento para presentar la iniciativa? ¿No habría que haberlo hecho antes?

Respuesta. Este año coincide con el 25 aniversario de la Constitución española y los socialistas pensamos que es hora, con la democracia suficientemente madura, de afrontar el debate de los olvidados. Aunque la derecha española se empeñe en decir que con el consenso constitucional se cerraron las heridas, no es cierto. Ahora, que no hay temor a que se quieran depurar responsabilidades, es el momento de devolver la dignidad a los que sufrieron represión por defender la democracia.

"Lo que quieren los familiares es tener, al menos, algún lugar al que llevar flores"

P. ¿Por qué la defiende usted? Le queda todo muy lejos.

R. No tiene nada que ver la edad, pero me parece positivo. Podría entenderse que una nueva generación que ha nacido y crecido en democracia quiere saber lo que ocurrió. Cuando estudié en el colegio, aparte de que los temas de la Guerra Civil eran los últimos y nunca se llegaba, la historia estaba muy sesgada. Es bueno que los jóvenes reivindiquemos la verdad de lo que pasó.

P. ¿Qué método se va a seguir para la búsqueda de restos?

R. Cuando se empezaron a crear las asociaciones de recuperación de la memoria, se pidió la apertura de una fosa en León y, en definitiva, cuando se empieza a hablar del asunto, entre los familiares se abren muchas expectativas de rescatar los restos o, al menos, localizar las fosas. Lo que quieren es que se les ponga un monolito al que llevar flores, y que los fallecidos tengan un enterramiento digno, que es lo que merecen todas estas personas. Lo que pasa es que se ha generado un cierto desorden respecto a las actuaciones que deben tener el movimiento asociativo, la familia y los ayuntamientos. La Junta, entonces, ha ideado crear un grupo de trabajo para estudiar dónde se encuentran los restos humanos y decidir, a petición siempre del familiar, en qué casos se podría proceder o no a la exhumación de los cadáveres, señalizar el lugar, hacer pruebas de ADN o documentar los hechos con testimonios de la gente del lugar. Es necesaria la colaboración del Gobierno de España para que facilite información de los archivos militares, también de los provinciales.

P. ¿Ha habido casos en que se ha construido encima?

R. No está claro, pero se ha producido una alarma muy grande porque el tema está a flor de piel. Hay que localizar los enterramientos para que se puedan respetar, sobre todo en las obras de infraestructura.

P. Ha pedido también información de la Fundación Franco, a la que subvenciona el Ministerio de Educación y Cultura.

R. El PP buscando el centro ha perdido completamente el Norte. No vale sólo con aprobar la iniciativa, es necesario creérsela. Y una de las formas de creérsela es dejar de primar a la Fundación Franco para que mantenga ocultos unos archivos que, por cierto, serían de gran interés para los objetivos que nosotros perseguimos. Mientras, otras fundaciones, como la de Juan Ramón Jiménez, no recibe dinero del ministerio, algo incomprensible.

P. En la Guerra Civil murieron muchos. El PP dice que el dolor es global.

R. Sí, pero unos tuvieron su homenaje, su sepultura. Los familiares han tenido indemnización. A las viudas del bando de los rebeldes, dicen, les dieron estancos, pero las de los republicanos no han tenido nada, ni siquiera un reconocimiento público, sólo la persecución, el miedo, el olvido y la sensación horrorosa de sentirse excluidas y apartadas.

P. Para eso hace falta dinero.

R. Claro. Se le ha pedido financiación al Gobierno central porque es necesario que se implique. No se puede decir que los fusilados lo fueron por rencillas personales. La Junta hará todos los esfuerzos, de hecho ya lo hizo al entregar en 2001 dos millones de euros a 272 familias que sufrieron privación de libertad, y ahora va a ampliar el decreto. Pero, qué duda cabe, necesitamos más dinero porque si pensamos en abrir las fosas y en identificar los cadáveres, estaríamos hablando de unas cantidades impresionantes que la Junta no podría asumir. Debe poner dinero todo el mundo.

P. Ha dicho que la gente todavía tiene miedo.

R. Para prepararme he visto a personas llorando y con miedo a contar, y se me han puesto los pelos de punta. Han pasado muchos años desde que se instauró la democracia, pero es ahora cuando están saliendo libros, trabajos, testimonios de personas anónimas. Hay muchas ansias de saber y conocer. Yo creo que no ha salido antes porque los verdugos estaban vivos, han muerto hace poco, y en una ciudad grande se podía soportar, pero en un pueblo de 300 habitantes debe ser muy duro y muy difícil. Aparte de la madurez democrática, había que tener garantías de que nadie pudiera vengarse porque salieran las cosas a la luz.