España apoya al pueblo cubano

El presidente del Gobierno, José María Aznar, se reunió el pasado miércoles en Miami con ocho organizaciones del exilio cubano y expresó la voluntad del Gobierno español de apoyar una transición pacífica hacia la democracia en Cuba. Se mostró claro al afirmar que "España quiere para Cuba lo que tiene España".

Esta afirmación no se produce por casualidad, sino que refleja un amplio consenso nacional respecto al asunto cubano. Este consenso se evidenció en la manifestación de la Puerta del Sol celebrada con motivo de las detenciones de casi ochenta disidentes en la isla hace ya más de seis meses. Estos demócratas siguen encarcelados, pero en este acto multitudinario todos los partidos políticos españoles con representación parlamentaria, salvo IU, sindicatos y asociaciones de derechos humanos, declararon su voluntad conjunta de apoyar un cambio en Cuba para lograr una democracia que respete los derechos humanos y las libertades públicas en la isla.

Desde la Asociación Española Cuba en Transición, queremos felicitar al presidente del Gobierno por transmitir este mensaje a la comunidad internacional, pero también queremos felicitar a los partidos de la oposición, que están creando este espíritu de consenso impulsando esta transición en Cuba. Hoy podemos afirmar que el pueblo cubano cuenta con el apoyo de España. No se trata de una cuestión partidista, sino que supone compartir aquello que nos une a los demócratas españoles. Ello exige colaborar activamente para que se establezcan las reglas de juego que permitan a los ciudadanos cubanos asociarse libremente, les reconozca su iniciativa económica, el derecho a elegir libremente su gobierno, a expresar sus ideas y a no ser detenidos por motivos de conciencia.

Esto es lo que desean Aznar y la mayoría de los políticos para Cuba y, como señaló ayer el presidente del Gobierno, se encarna en el Proyecto Varela, que ha conseguido reunir dentro de Cuba más de las 11.000 firmas que exige la Constitución cubana para la celebración de un referéndum con el objeto de introducir reformas democráticas en la isla. Como señala Oswaldo Payá, promotor del Proyecto Varela y candidato al Premio Nobel de la Paz, persigue "el derecho de los cubanos a tener derechos".

España y Cuba se encuentran unidos por estrechos vínculos históricos, culturales y económicos; no en vano, España encabeza la lista de inversores en la isla. Todo ello resalta la importancia que tiene este consenso nacional de prestar apoyo a una transición democrática pacífica en la isla, y el apoyo a las iniciativas que se producen dentro de la isla, como el Proyecto Varela, es esencial para lograrlo. Los cubanos de dentro y de fuera deben trabajar juntos para conseguir que la transición se realice desde dentro de forma pacífica.

Ahora hay que esperar que este apoyo se materialice en hechos concretos, como señaló Havel, ex presidente de la República Checa, cuando propuso la creación de un fondo común europeo para apoyar el cambio político en la isla.