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El Ayuntamiento monta un patrullaje policial "intensivo" en La Florida

El aumento de la vigilancia en la urbanización de lujo choca con la escasez en otros barrios

La Policía Municipal, que depende de la Concejalía de Seguridad, ordenó el pasado 4 de julio, ante las "numerosas quejas [recibidas] de los vecinos de La Florida [Moncloa-Aravaca]" por la inseguridad ciudadana, dotar de un "servicio intensivo de vigilancia" a esa urbanización de lujo: dos coches patrulla que velan por la tranquilidad de los dueños de sus 300 chalés en turnos de mañana, tarde y noche. Ninguno de los 21 distritos de Madrid -en el menor de ellos, Barajas, viven 38.000 personas- tiene asignada tanta policía en horario nocturno. "Es una discriminación clarísima", dice IU.

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Las calles de La Florida son públicas desde 1990

La Florida es una urbanización de lujo de 300 chalés situada entre la carretera de A Coruña y el monte de El Pardo, en el distrito madrileño de Moncloa-Aravaca. Sus habitantes, hartos de los robos y asaltos que sufren, tomaron el verano pasado dos decisiones: por un lado reclamaron al Ayuntamiento más presencia policial -que viene a sumarse a la seguridad privada contratada por los residentes-; y, por otro, empezaron a vallar las entradas de la urbanización y a cerrar con barreras y garitas de vigilancia sus calles. Eso es "ilegal", según confirmó el edil delegado de Vivienda, Sigfrido Herráez (ver EL PAÍS de ayer), porque "las calles de La Florida son públicas".

Más comprensivo fue el Ayuntamiento con la petición de auxilio realizada por los vecinos. Una orden enviada el 4 de julio por la Inspección de Servicios de Distrito y Policía de Barrio, y firmada por el mando de la subinspección de Servicios Generales, Federico García Santamaría, se hace eco de las "numerosas quejas de los vecinos del barrio de La Florida" y los asaltos a personas y robos contra la propiedad que "han causado gran alarma entre los vecinos".

A la vista de ello, continúa la nota, "se establecerá un servicio intensivo de vigilancia en la zona afectada [...], tanto en turno de mañana como en el de tarde", al que habrá que sumar otro servicio intensivo de la "Unidad Nocturno Operativa". Además, la orden policial señala que "se emitirá un informe, en el plazo de un mes", precisando los "resultados obtenidos e intervenciones realizadas".

Una semana después, el 11 de julio, un anexo a esa orden detalla el "servicio intensivo" que los agentes deben poner en marcha "de forma inmediata" en La Florida: "la asignación de dos indicativos [dos coches] que patrullarán la zona de forma intensiva y evidente en los tres turnos". La nota añade: "Se insiste en la necesidad de hacer patente la presencia policial al objeto de tranquilizar a los vecinos. Se hace preciso el contacto con los denunciantes y vecinos de la zona a la mayor brevedad para adecuar la vigilancia a la situación real".

"Sólo hacen rondas"

Fuentes municipales confirmaron ayer a EL PAÍS que el dispositivo se ha puesto en marcha, aunque precisaron que "esos coches patrulla no están asignados de forma fija a la urbanización de La Florida", sino que hacen "rondas esporádicas" en turnos de mañana, tarde y noche.

El refuerzo inmediato de la presencia policial en una urbanización de lujo contrasta con la escasez de protección policial que sufren otros barrios de menor nivel económico. El propio concejal de Seguridad y máximo responsable de la Policía Municipal, Pedro Calvo Poch, admitió la semana pasada que ni siquiera se dispone de una patrulla fija para cada distrito en horario nocturno, al tiempo que prometía duplicar esa dotación para que, a principios del próximo año, haya al menos 80 agentes -de los 6.300 que componen la plantilla- dedicados a proteger a los madrileños por la noche.

"Es una discriminación clarísima. Para que las destacadas personalidades que viven en la Florida tengan dos patrullas a su disposición mañana, tarde y noche, otros barrios tendrán que quedarse sin nada. En el distrito de Villaverde, por ejemplo, ha habido varias manifestaciones en estos meses exigiendo más presencia policial, y el gobierno municipal del PP no ha hecho ni caso a esos vecinos", protesta el concejal de IU Julio Misiego, antes de recordar que "la seguridad es un derecho constitucional e igual para todos los ciudadanos". "Quejas por la criminalidad hay muchas en esta ciudad, y puntos más calientes que el de La Florida debe de haber al menos cien", agrega.

Vallas ilegales

El grupo municipal de IU va a pedir explicaciones al gobierno municipal, no sólo por ese "trato de favor" a la elitista urbanización de Aravaca, sino también por su "dejadez" ante la ilegalidad que están cometiendo los vecinos que han cerrado las calles internas de La Florida con vallas. A pesar de que el Ayuntamiento reconoce que todos los viales de esa urbanización son públicos y, por tanto, de libre acceso, nadie acudió ayer a comunicar a los residentes que deben retirar las barreras. El concejal de Seguridad, Pedro Calvo, rehusó contestar, a preguntas de este periódico, si piensa ordenar la retirada de las vallas o no.

Por las calles de La Florida no sólo circulan los vehículos de los dueños de sus 300 chalés. También entran y salen los casi 2.000 trabajadores de las empresas que se han instalado en la zona en los últimos años, otros que escapan durante un pequeño trecho del atasco de la carretera de A Coruña y algunos más que trabajan en oficinas instaladas en terrenos cercanos. A todos les afecta la decisión de los vecinos de La Florida de blindar sus entradas. Una conductora lo explicaba así ayer: "Mi casa está en el norte. Si cierran este acceso, me veré obligada a salir hacia la M-40 y luego dar la vuelta. Si realmente las calles son públicas, no tienen derecho a hacer esto. Estoy de acuerdo en que la zona no está preparada para tanto coche, pero la culpa no es de los que trabajamos aquí".

Un juez paraliza el 'blindaje'

La operación de blindaje que han puesto en marcha los residentes de la urbanización de lujo La Florida para evitar que los delincuentes entren a sus calles son "ilegales", según el Ayuntamiento de Madrid. Así lo ha debido de entender también un juez de Madrid, que ha ordenado la paralización cautelar de esas operaciones (colocación de vallas y barreras en los accesos de la urbanización) a la espera de que su legalidad se dirima en un juicio, según fuentes municipales.

El juicio, que se celebrará a principios del próximo mes, es consecuencia de la denuncia interpuesta por una de las empresas establecidas en el interior de La Florida y cuyos trabajadores, al no ser residentes, están teniendo problemas para acceder a las instalaciones con sus vehículos.

La portavoz de la comunidad de propietarios asegura que los vecinos no pretenden impedir el paso a nadie, aunque no especifica de qué forma piensan utilizar las vallas ni si harán excepciones con los empleados de esas empresas o con los de otras oficinas de los alrededores que también atraviesan la urbanización cada día.

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