Los socialistas rechazan reformar la ley del Patrimonio

Varios cargos públicos del PSPV coincidieron ayer en rechazar la reforma de la Ley de Patrimonio Valenciano que propugna el Consell. Desde las filas socialistas se considera que el PP plantea la reforma para poder ejecutar dos iniciativas que chocan con la preservación del patrimonio: la construcción de un palacio de congresos en la ladera del monte Benacantil, en Alicante, y la prolongación de la avenida de Blasco Ibáñez a través del barrio del Cabanyal, en Valencia.

La portavoz adjunta del grupo socialista en las Cortes Valenciana, Nuria Espí, dijo que el titular de Cultura, Esteban González Pons, demuestra "no tener un talante dialogante al proponer al PSPV apoyar la reforma de la Ley del Patrimonio a cambio de no demoler el Teatro Romano de Sagunto". La diputada cuestionó el supuesto consenso que ofrece el PP. "González Pons habla de consenso cuando la ley ya está redactada y nosotros no tenemos ni el texto", explicó. La portavoz de Cultura de la ejecutiva del PSPV, Isabel Escudero, calificó la iniciativa de "golpe de efecto" del consejero para intentar trasladar a los socialistas sus responsabilidades. "No vamos a entrar por la puerta falsa para facilitar otras operaciones especulativas en el Benacantil y El Cabanyal", comentó.

Contundente fue la alcaldesa de Sagunto, la también socialista Gloria Calero, quien declaró a la SER que el Gobierno de Francisco Camps pretende dar vía libre a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, para partir en dos El Cabanyal. Calero pidió a González Pons que no salpique a los socialistas con los problemas del PP. "Tiene una gran habilidad para quitarse las pulgas de encima", señaló la alcaldesa, quien reiteró que "Sagunto está paralizado culturalmente porque el PP llevó la reforma del Teatro Romano a los tribunales".

Por su parte, Blas Bernal, portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Alicante, calificó la modificación de la normativa de patrimonio como "una auténtica perversión del sistema democrático". Para Bernal, la reforma de la ley en vez proteger y defender el patrimonio, "impulsará el desarrollo urbanístico". El portavoz del grupo socialista instó, una vez más, al alcalde de la ciudad, Luis Díaz Alperi, a que reconsidere su decisión de ubicar el palacio de congresos en la ladera del Benacantil y asuma la oferta del PSPV de ubicarlo en los solares de la antigua fábrica de Tabacalera.

Para la plataforma ciudadana Salvem el Benacantil, la actualización de la Ley del Patrimonio Cultural "es un caso evidente de intromisión del Poder Legislativo en el de Justicia". Salvem el Benacantil acusa al Consell de "prevaricar" al hacer estas declaraciones o de "ignorar" que el proyecto del palacio de Congresos "está paralizado por el Tribunal Superior de Justicia".