La CIA confirma que la voz de la última grabación difundida en televisión es la de Sadam Husein

Los servicios de inteligencia de EE UU consideran que la voz de la grabación en la cual se rechazan las acusaciones de responsabilidad por el atentado de la semana pasada en Nayaf es probablemente la de Sadam Husein. Un funcionario de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) dijo hoy que la voz probablemente es la de Sadam, pero la grabación, difundida por la red de televisión Al Yazira de Qatar y atribuida al ex líder iraquí, es de muy mala calidad y eso impide un análisis técnico definitivo. En la grabación, la voz dice que los acusadores "se apresuraron a acusar antes de investigar" el ataque en el que murieron el ayatolá Mohamed Baquer al Hakim y más de 100 personas. "Muchos de ustedes han oído el siseo de las víboras, los sirvientes de los invasores, ocupantes, infieles, y cómo se las arreglaron para acusar a los seguidores de Sadam Husein de la responsabilidad por el atentado a Al Hakim, sin prueba alguna", dice la grabación.

Por otro lado, un soldado estadounidense resultó herido ayer, al ser atacado el convoy de periodistas polacos que viajaba hacia Babilonia para asistir a la ceremonia de traspaso de mando. "Viajábamos de madrugada hacia Babilonia para presenciar la ceremonia de entrega del sector central a la División Multinacional, cuando fuimos atacados con granadas y ráfagas de ametralladora", informó el periodista Pawel Wronski, del diario Gazeta Wyborcza. "Lo que más nos impresionó fue que, antes de partir, se nos aseguró que la carretera por la que circularíamos era la más segura de Irak", dijo Wronski.

La Asamblea Suprema para la Revolución Islámica (ASRI, chií) eligió ayer a Abdelaziz al Hakim como nuevo jefe del grupo, en sustitución de su hermano Mohamed. Según un comunicado de la ASRI, Abdelaziz al Hakim fue elegido por unanimidad por las instancias dirigentes de la organización.

Mientras los dirigentes políticos continúan en el Consejo de Gobierno provisional iraquí, ayer prestaron juramento los miembros del nuevo Ejecutivo, compuesto por tecnócratas que quieren mostrar que no son marionetas de Estados Unidos.