La ONU afirma que Taylor sigue siendo un peligro para Liberia
El antiguo señor de la guerra y ex presidente liberiano, Charles Taylor, pese a estar exiliado desde hace más de una semana en Nigeria, sigue representando un peligro para Liberia, según ha afirmado el enviado especial de Naciones Unidas para Liberia, Jacques Klein. "Charles Taylor, con un teléfono móvil, es casi como un gobierno desde el exilio, potencialmente bastante peligroso", dijo ayer Klein.
Taylor, buscado por el Tribunal Especial de Sierra Leona, vive ahora en una elegante residencia en la ciudad nigeriana de Calabar, al sureste del país. Nigeria no ha firmado ningún convenio con el tribunal, que está apoyado por la ONU, por lo que no se espera que entregue a Taylor, acusado de crímenes contra la humanidad durante la guerra civil que devastó a ese país hasta 2002. Nigeria también ha dejado claro que no permitirá que Taylor mantenga su actividad política. Al salir de Liberia, el sanguinario ex presidente afirmó: "Si Dios lo quiere, regresaré".
El enviado de la ONU señaló que si Taylor intenta volver a Liberia será inmeditamente detenido. "Será detenido. Me encantaría hacerlo", dijo Klein, que ha calificado a Taylor de "psicópata". Los combates en el país han remitido desde que el ex presidente lo abandonara, aunque se han registrado enfrentamientos en algunas regiones del interior que han dificultado las tareas humanitarias.
