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El PSPV pide un plan para atajar el "colapso" de las urgencias

Los socialistas consideran que el problema es estructural

El Grupo Socialista de las Cortes Valencianas denunció ayer el "colapso" que sufren los servicios de urgencias de los hospitales valencianos y reclamó al Consell la elaboración de un plan integral que permita "garantizar la capacidad de respuesta inmediata" de esos servicios, que sobre todo en verano y en pascua, así como en circunstancias especiales, como las epidemias de gripe, ven incrementada la demanda.

La diputada socialista Encarna Llinares aseguró que los servicios de urgencia de los hospitales públicos valencianos "no reúnen las condiciones óptimas para prestar una asistencia sanitaria adecuada a los residentes y turistas" y denunció que en estos días de verano, como sucede también en otros periodos vacacionales, como pascua, o en circunstancias especiales como las epidemias, las urgencias están "colapsadas". Llinares lamentó las condiciones que sufren los pacientes que acuden a los servicios de urgencia, que, aseguró, a veces "tienen que esperar 4 o 5 horas para ser atendidos y deben estar en camas en los pasillos". Llinares calificó de "intolerables" esos tiempos de espera.

Por eso, la parlamentaria socialista instó al Consell a dotar a los hospitales de las infraestructuras, reformas y ampliaciones necesarias para el correcto funcionamiento de los servicios de urgencias. Porque, según explicó, los problemas de los servicios de urgencias "no son puntuales, sino estructurales". Y a partir de ahí desgranó una serie de datos que ponen de relieve la necesidad de mayores inversiones. Unas inversiones que, según Llinares, se han frenado durante los años de gestión del PP, que no sólo "no ha hecho las infraestructuras necesarias", sino que "deteriora el sistema sanitario público con conocimiento de causa", para beneficiar al sector privado.

Para empezar, Sanidad sólo sustituye al 20% del personal que está de vacaciones. Además, la Comunidad Valenciana está a la cola en lo que respecta a los ratios de camas por habitante. Por otra parte, los hospitales sufren índices de ocupación que superan el 80% y que en algunos casos llegan a límites insostenibles, como el 90,5% de ocupación que, según dijo, registra el hospital La Fe de Valencia. Según la diputada, "unos buenos gestores deberían tener en cuenta [todos estos parámetros] para planificar, organizar y estructurar los servicios sanitarios públicos".

La respuesta del PP no tardó en llegar por mediación del portavoz adjunto del Grupo Popular de las Cortes, Antonio Clemente, quien aseguró que la Consejería de Sanidad "ha invertido cerca de 50 millones de euros para garantizar la adecuada asistencia sanitaria tanto a los valencianos como a los turistas en los meses de verano", informa Efe. Clemente añadió el departamento de Sanidad "ha realizado un importante esfuerzo inversor en atención primaria reforzando las plantillas sanitarias en 657 personas, de las que 274 son médicos y 197 enfermeros".

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