_
_
_
_

Lula adelanta la votación de las reformas para evitar protestas

Los funcionarios se quieren manifestar contra el presidente de Brasil

Juan Arias

Acosado por varios flancos, con el dólar de nuevo por encima de los tres reales y los rumores sobre la dimisión del ministro de Economía, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, decidió no esperar ni un día más para que la Cámara de Diputados votase el polémico proyecto de reforma de la Seguridad Social. Su idea era que el texto fuera aprobado ayer mismo, incluso durante la noche, para evitar que dicha votación coincidiera hoy con la marcha de los 40.000 funcionarios públicos sobre Brasilia convocada para protestar contra las reformas sociales.

Más información
Lula saca adelante en la primera votación del Congreso su polémica reforma de las pensiones

Para conseguir su propósito, Lula mantuvo frenéticas reuniones con los líderes de los aliados del Gobierno y con varios ministros hasta muy entrada la noche para resolver las últimas reivindicaciones de tirios y troyanos, es decir, de los que, como los jueces, quieren mantener viejos privilegios y los que le piden que mejore la situación, en el proyecto, de los más desprotegidos, subiendo el techo de las jubilaciones más bajas. La noche del lunes acabó sin acuerdo y ayer por la mañana continuaron de forma frenética toda una serie de reuniones, mientras el Parlamento fue convocado en sesión plenaria para comenzar a discutir el proyecto ya aprobado por el Gobierno incluso sin aún haber decidido sobre las últimas posibles correcciones.

Entre ellas figura el empecinamiento del poder judicial, que no acepta la propuesta del Gobierno de que los jueces estatales no puedan ganar ni tener como jubilación más del 75% del sueldo actual de un magistrado del Tribunal Supremo, el cual ya gana casi el doble que el mismo presidente de la República. Los jueces exigen seguir ganando no menos del 90,25% de sus compañeros del Supremo.

Los funcionarios, convocados para hoy en Brasilia por los sindicatos, al saber que el presidente Lula había adelantado la fecha de la votación en el Parlamento, comenzaron a llegar ayer mismo. Muchos de ellos esperaban en el aeropuerto a los diputados que aterrizaban desde todo el país para asistir a la votación, intentando convencerles para que votaran en contra. Manifestaciones de protesta estaban teniendo lugar ayer en varios Estados. En las fronteras de Brasil con Paraguay y Argentina centenares de camiones tenían bloqueado el tráfico.

La dura nota del Gobierno desmintiendo las dimisiones de su ministro de Economía, Antonio Palocci, figura clave del actual Gabinete, la firme voluntad de Lula de conseguir la votación cuanto antes en el Parlamento y los rumores de que no estaba dispuesto a rendirse ante las exigencias del Poder Judicial, consiguieron frenar la subida del dólar aunque en la tarde de ayer estaba aún por encima de los tres reales.

Aunque el Gobierno sabe que la simple aprobación por parte de la Cámara de la reforma de la Seguridad Social no asegura su éxito, ya que habrá batalla también el Senado, para Lula sería ya una gran victoria este primer paso, algo que no habían conseguido nunca sus antecesores. Contra el proyecto de reforma de la Seguridad Social, presentado por el ex presidente Cardoso en 1999, habían votado en contra varios de los líderes de su mismo partido, impidiendo su aprobación. Baste recordar que uno de los puntos, al parecer con consenso de la nueva ley, prevé que los 40 millones de trabajadores urbanos que hoy no tienen derecho a la Seguridad Social ni a una jubilación en el futuro, podrán conseguirlo con sólo aportar a partir de ahora un 8% del salario base, que es de 80 euros.

Ayer tarde, el Gobierno negociaba con la oposición la posibilidad de dar la palabra en la Cámara sólo a los 10 primeros inscritos. El Ejecutivo estaba convencido de que podría contar en el Parlamento con 380 votos a favor de la reforma. El mínimo necesario es de 308. Del Partido de los Trabajadores (PT), al que pertenece Lula, sólo tres votarán al parecer en contra, en cuyo caso serían inmediatamente expulsados del partido.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_