Los empresarios auguran un buen año
La demanda interior y la caída de tipos de interés impulsan la facturación y los beneficios, una vez finalizada la guerra
Las empresas españolas están muy lejos de pensar que la economía está sumida en una crisis. Aplacados los efectos de la guerra, en el segundo trimestre la mayoría ha vendido y ganado más, y enfrenta el resto del año con optimismo.
El 87,5% retrasa el inicio de la recuperación en Europa a 2004, mientras la mayoría afirma que en España se iniciará este mismo año
¿Crisis? Mientras la demanda doméstica siga fuerte y los tipos de interés en sus actuales niveles -o como esperan muchos empresarios, todavía más bajos- esa palabra será ajena al empresariado español. Según el Barómetro de Empresas elaborado por Deloitte & Touche -con la participación de 389 compañías que facturan más de 960.000 millones de euros y emplean a más de un millón de personas-, en el segundo trimestre del año el 65% aumentó la facturación; el 66,8% el beneficio; el 52,2% invirtió más, y prácticamente la mitad mantuvo la plantilla.
Los empresarios destacan entre las causas para esta situación el tirón de la demanda interna, que en esta ocasión se conjuga con un ligero repunte de las exportaciones, unos costes financieros favorables y el aumento de la productividad.
Con vistas al segundo semestre, el optimismo aumenta. El 72,6% espera incrementar su producción; una tercera parte confía en aumentar el empleo; el 69,1% opina que aumentará el beneficio, y el 52,3% la inversión.
Más de la mitad de los encuestados (52,5%) considera que en la segunda mitad del año la economía mejorará, y sólo el 13,4% opina que evolucionará peor. Las perspectivas sobre la situación española son mejores a las expresadas con respecto a la zona euro. El 87,5% retrasa el inicio de la recuperación en Europa al año que viene, mientras la mayoría afirma que la recuperación en España se iniciará este mismo año. Según la encuesta, la evolución económica del resto de los países europeos y los tipos de interés serán las variables que más afecten a la economía española.
En este clima de mayor optimismo -el barómetro anterior se empezó a elaborar en plena tensión prebélica- los empresarios valoran mejor la política económica del Gobierno, ya que las opiniones favorables aumentan hasta el 50%, desde el 39,8% anterior. Los asuntos relativos al gasto público y la fiscalidad son los que obtienen mejor calificación, mientras las mayores críticas las reciben las políticas sobre investigación y desarrollo, seguida de la liberalización del mercado laboral. El 58% de los empresarios considera que debe respetarse el Plan de Estabilidad y Crecimiento en Europa, que limita el déficit público, y el 71,5% no cree que exista en la zona peligro de deflación.
Por sectores, en el segundo trimestre del año el de detallistas es el que mayor porcentaje presenta en aumento de la facturación (92%) y del empleo (58%); finanzas y seguros toma la cabeza en aumento del beneficio (86%), y construcción en inversión (92%).
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