La Audiencia de Barcelona envía a la cárcel a un maltratador a pesar de que su víctima le perdona
La Audiencia de Barcelona ha encarcelado a un hombre acusado de maltratar a su mujer pese a las súplicas y deseos de ésta de perdonarlo "una vez más" para reanudar su vida en pareja.
En su resolución, los jueces dicen que adoptan esta decisión para evitar, quizás, un nuevo episodio de violencia doméstica "irreparable" y porque no pueden permanecer "impasibles" ante el cada vez más creciente número de mujeres que perdonan una o más veces a sus parejas y luego son asesinadas o maltratadas. Los magistrados critican la falta de medios para que jueces, fiscales o policías puedan proteger a las víctimas.
En su fallo ratifican la sentencia de un juez instructor de Terrassa de encarcelar preventivamente a Manuel B. C., acusado de violencia habitual sobre su cónyuge, a la que, supuestamente, ha amenazado de muerte con un cuchillo y ha quebrantado en varias ocasiones la medida cautelar de alejamiento. La víctima se presentó hasta dos veces en la Sala anunciando que perdonaba a su marido y suplicando que lo dejaran libre, pues quiere volver a vivir con él en el que fuera el hogar conyugal.
Actuación protectora
Para la Audiencia, "estas manifestaciones no son inocuas, pero en absoluto pueden comportar sin más que los responsables de administrar justicia renuncien a cumplir con su doble deber de proteger a la víctima (incluso en contra de su voluntad si es necesario) y perseguir al culpable".
"No debemos olvidar", dice la Sala, "que, desde todos los estamentos públicos con competencias en materia de violencia doméstica, se insiste reiteradamente en el mensaje de la necesidad imperiosa de que víctimas y testigos de estos delitos lo denuncien, para ser asistidas de forma integral y eficaz, rompiendo así con el aislamiento y anulación de la capacidad reactiva de la afectada que, por desgracia, con tanta frecuencia les atenaza después de sufrir malos tratos durante un prolongado periodo de tiempo".
Los jueces lamentan que, "por desgracia, no es infrecuente que las mujeres maltratadas sufran una segunda victimización añadida a cargo del sistema, vista la limitada eficacia de las instituciones implicadas (policía, jueces, fiscales y entidades públicas de asistencia social) en orden a protegerlas y garantizar su seguridad". A la humillación, vejaciones y lesiones iniciales "se suma entonces la impotencia de comprobar que el sistema legal no responde a las expectativas creadas", señala el auto.
En sus reflexiones, la Audiencia considera "inadmisible que un tribunal de justicia deba limitar su actuación protectora y correctora a la voluntad de las partes (en alusión a las súplicas de la mujer de perdonar a su marido), cuando el delito perseguido es de naturaleza pública por afectar a la integridad, dignidad y libertad de las personas".
El fallo estima que la violencia doméstica es un delito muy grave, "por más que la víctima manifieste su sorprendente voluntad de 'perdonar una vez más' al presunto agresor y reanudar la convivencia con él, y aun respetando tan personal e íntima decisión derivada de insondables causas afectivas, los jueces debemos continuar adoptando las medidas cautelares imprescindibles para evitar que -fruto de dicho perdón particular- se produzca una nueva agresión con resultados quizás irreparables".
