Agricultura ecológica
En el reciente debate sobre el estado de Andalucía, el presidente de la Junta hizo referencia a la agricultura ecológica como un ejemplo de segunda modernización de Andalucía. Es importante este reconocimiento del presidente, teniendo en cuenta que es el mejor exponente del desarrollo sostenible que la sociedad cada día demanda más.
Por diversas razones he seguido de cerca el proceso de desarrollo de la producción ecológica en Andalucía, comprobando el esfuerzo que se ha venido haciendo por un grupo de personas del Comité Andaluz de Agricultura Ecológica, sin apenas apoyo técnico y económico de la Consejería de Agricultura.
No puedo entender cómo, en días pasados, el consejero de Agricultura afirmaba en Córdoba la importancia de la producción ecológica, poniendo como objetivo conseguir el 10% de la superficie agraria en Andalucía con la denominación ecológica, sin un reconocimiento público de cómo esto está siendo posible. De las 257.000 hectáreas que dice el consejero que están declaradas, la mayor parte de ellas no están acogidas a la línea de ayudas. He tenido interés en conocer estas cifras y en este momento son menos de 60.000 hectáreas las que están acogidas a las ayudas de agricultura o ganadería ecológica. Por cierto, sería importante y necesario que el consejero se interesara por cuáles son las razones de que haya muchos solicitantes que aún no han cobrado las ayudas de los años 2001 y 2002.
Reconozco el esfuerzo que se está haciendo en algunas de las oficinas comarcales de Huelva, organizando jornadas, como la realizada en Zalamea la Real en relación al sector ganadero ecológico.
Lo que también reconozco es el poco interés del señor consejero en reunirse y conocer la problemática del sector, por ejemplo el de las castañas en Huelva o las grandes posibilidades en la ganadería ecológica. Sí veo en la Consejería de Medio Ambiente una mejor disposición y colaboración. En definitiva, me gustaría una consejería más a pie de tajo y un apoyo práctico al sector y no sólo declaraciones y fotos, como las que realiza el señor Plata.
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