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Basilea acoge todas las tendencias del arte y busca nuevos coleccionistas

10 galerías españolas están en la feria, en la que el 27% de las obras no llega a 5.000 euros

La 34ª edición de la Feria de Arte de Basilea, una de las más importantes del mundo, confirma este año su alto nivel de calidad. Son 270 las galerías representadas (seleccionadas entre 930 presentadas), que exhiben obras de 1.500 artistas que cultivan los lenguajes más diversos y que utilizan todo tipo de soportes dentro de la tendencia artística actual de romper todas las fronteras. La feria, en la que participan 10 galerías españolas, confirma la pujanza del arte español e iberoamericano y busca nuevos compradores ofreciendo el 27% de las obras a menos de 5.000 euros.

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Los organizadores sólo han aceptado a 270 galerías, provenientes de los cinco continentes, de un total de 930 candidaturas que se presentaron. Así, serán unos 1.500 artistas los que expondrán sus obras ante unos 50.000 visitantes que se espera que recorran las instalaciones de la Feria de Basilea (abierta desde ayer hasta el próximo lunes), que dirige Samuel Keller y que ofrece piezas de destacados nombres del siglo XX junto a las propuestas de los más jóvenes creadores. Alemania está representada con 58 galerías; Estados Unidos, con 53; Suiza, con 38; Francia, con 24; el Reino Unido, con 22. De España acuden 10 (Juana de Aizpuru, Helga de Alvear, Pepe Cobo, Soledad Lorenzo, Elvira González, Marlborough, Tomás March, Joan Prats, Polígrafa y Toni Tàpies).

Helga de Alvear, de Madrid, explicó el martes a Efe en la presentación de la feria que la relativamente escasa presencia de España no se debe sólo a "lo duro que es el comité de selección" y a los elevados costes que supone, sino también a la falta de constancia de algunos galeristas, que no vuelven si no tienen el éxito esperado el primer año. "Yo misma estuve sin vender apenas casi los cinco primeros años", contó la galerista, que ya tenía comprometidas varias piezas.

La galería Elvira González, de Madrid, muestra piezas de Joan Miró -Mujer y ave (1963), Mujer y estrella (1942)- y una escultura de Julio González, Cabeza larga (1932-1933). Isabel Mignoni, responsable de la galería, explicó que las obras intentan proporcionar no sólo una imagen del arte español, "sino del total de obras que manejamos". Por eso, su muestra se extiende a creadores norteamericanos, como Donald Judd, el padre del arte minimal. La galería también presenta trabajos de Antoni Tàpies, como Gross en brown (1960), Grey sand (1958) o Open bed (1986), y de Eduardo Chillida: sus gravitaciones, pequeñas manufacturas de papel que permanecen suspendidas por un hilo, dan al público otra perspectiva de la creación. Conjuntando tradición y modernidad, la muestra madrileña da igualmente cabida a creadores noveles. Juan Ascencio, con sus formas geométricas limpias, atrae a los visitantes. Mientras que Helena del Rivero, en lugar de pintar, cose sus obras, como la titulada Bailando con minimalismo (1996).

Y, en materia de revistas de arte, la española Exit se presenta por segundo año consecutivo. Fundada en 2000 por Rosa Olivares, tiene dos ediciones: Exit, que aparece cuatro veces al año, y Exitbook, que se publica dos. "Para nosotros, estar aquí es una buena opción. Sin duda alguna, Basilea es la mejor feria del arte del mundo y prácticamente venimos para estar entre la gente del medio", dice Olivares.

Picasso (majestuosamente presentado por la Alan Cristea Gallery, de Londres), Kirchner, Klee, Magritte, Warhol, Basquiat, Richter, Baselitz, Kiefer, Flavin, Pistoletto, Hockney y también Miquel Barceló son algunos de los artistas presentes en la feria, que además muestra un amplio espectro de las tendencias del arte actual.

Así, por ejemplo, los artistas latinoamericanos han debutado con honores. Bajo el patrocinio de la galería OMR (Ortiz Monasterio, Riestra), de México, un joven pintor está causando una verdadera sensación entre los presentes. Porque Daniel Lezama (México, 1968) transforma la pintura mexicana del siglo XIX y la replantea reflejando los pormenores de la vida cotidiana de los habitantes de la gran urbe azteca. "Este pintor se encuentra en la línea de los grandes muralistas mexicanos. Esos que llevaron el naturalismo a sus niveles máximos. Pero lo que hace es retratar temas tabú de la ciudad de México, como el deleite de los narcos, los incestos entre las familias populares o el ambiente de las cantinas", explicó Jaime Riestra, uno de los propietarios de OMR.

Por lo demás, la Feria de Arte de Basilea sigue su modelo tradicional. En lo que a mezcla de artes y formas de hacer la creación respecta, mantiene su sección Art unlimited. Cincuenta y cinco proyectos cautivadores son expuestos, entre los que destacan los de Richard Serra y Paul McCarthy. El primero tiene una escultura monumental de 40 toneladas erigida en la plaza de la feria, y el segundo presenta seis cofres en los que incluye todos los materiales que ha usado, entre 1973 y 1983, para realizar sus performances.

Los precios no son un obstáculo para los visitantes. De acuerdo a cifras proporcionadas por los organizadores, el 27% de las obras expuestas en Basilea cuestan menos de 5.000 euros.

<i>Collateral damage</i> (2002), de Jan de Cock, una de las instalaciones expuestas en Basilea.
Collateral damage (2002), de Jan de Cock, una de las instalaciones expuestas en Basilea.
<i>I&#39;am the sun</i> (2002), de Chris Johanson.
I'am the sun (2002), de Chris Johanson.
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