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Reportaje:

Albatera, paradigma de la desertificación

Un grupo de expertos aplica en el municipio un proyecto pionero en la recuperación de entornos degradados

Albatera (Vega Baja) es el paradigma de cómo el uso intensivo del terreno durante años -en este caso, el pastoreo y la tala de árboles para leña- unido a las escasas lluvias han supuesto una degradación importante del suelo. El deterioro del terreno ha llegado a un punto difícilmente recuperable por sí mismo sin la intervención del hombre, describe Susana Bautista, profesora de la Universidad de Alicante, institución que participa en la elaboración de un programa nacional en la lucha contra la desertificación.

Las peculiaridades medioambientales de Albatera, miméticas a la de otros puntos de la provincia de Alicante afectadas por la sobreexplotación, han sido claves para que haya sido escogida por un conjunto de científicos en el desarrollo de un proyecto de regeneración del entorno.

El programa piloto, que alcanza a 25 hectáreas de la cuenca de Albatera, va más allá de un plan estándar de reforestación de la flora. Su coste es, por tanto, más elevado pero más eficaz. "Se trata de recomponer el funcionamiento del ecosistema anterior a su sobreexplotación", recalca Bautista. El proyecto, auspiciado por la UE, consiste en la preparación del terreno antes de su reforestación. Para ello, los especialistas han aplicado cubiertas de restos vegetales para reducir la evaporación y han colocado protectores a las plantas para reducir la radiación solar y favorecer su implantación. "Son una batería de tratamientos que ya hemos probado experimentalmente y que ahora pasamos a llevarla a término", dice la profesora. Como en todos los paisajes semiáridos, esta cuenca presenta multitud de problemas que han de ser atajados con avanzadas técnicas, señala Bautista. Por ello, los expertos han tenido en cuenta esa variabilidad a la hora de introducir las especies endémicas. La vegetación es tratada con el fin de optimizar el aprovechamiento del agua, tan escasa en la zona, e incrementar los nutrientes del suelo. Una vez experimentado el éxito del programa se podrá extrapolar a otras zonas de la provincia con un diagnóstico similar.

Bautista valoró estas intervenciones en zonas como la Comunidad y, especialmente, en el sur de Alicante, donde el clima seco y donde las lluvias torrenciales y la sobreexplotación le han convertido en la zona más afectada de Europa por la desertificación. El proyecto de Albatera se presentó el domingo, en el congreso Medidas de Prevención y Restauración en la lucha contra la desertización, organizado por la UE y celebrado en Alicante.

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