El Supremo insta al fiscal a que actúe por la no disolución del grupo parlamentario 'abertzale'
El PNV dice que Atutxa no incurrió en delito y Batasuna pide amparo al Constitucional
La Sala Especial del Tribunal Supremo que ilegalizó Batasuna y ordenó después la disolución del Grupo Parlamentario vasco Sozialista Abertzaleak (SA) acordó ayer instar al Ministerio Fiscal a que "emprenda las acciones legales que correspondan" frente a la negativa del Parlamento vasco, expresada por su presidente, Juan María Atutxa, a disolver dicho grupo. Desde el PNV, su presidente en Guipúzcoa, Juan María Juaristi, aseguró que "no hay ningún tipo penal" en la actuación de Atutxa. Batasuna recurre hoy ante el Tribunal Constitucional contra la disolución de SA.
El acuerdo del Supremo fue adoptado por unanimidad de los magistrados de la Sala Especial, que debatieron el asunto en la tarde de ayer durante dos horas. El alto tribunal acordó además adoptar medidas concretas de ejecución,que concretará a partir de la próxima semana, entre las que previsiblemente se contarán el embargo de subvenciones a SA, la incautación de locales y bienes del mencionado grupo, así como de los beneficios que hasta ahora les correspondían como grupo parlamentario.
Para perfilar todos estos puntos, dada la ausencia de precedentes en la materia, la Sala Especial del Supremo acordó reunirse de nuevo el miércoles próximo, 18 de junio.
En cuanto a la negativa de disolver SA, el Ministerio Fiscal deberá estudiar ahora qué acciones penales cabe emprender contra el presidente de la Cámara vasca y, eventualmente, contra algún otro diputado del Parlamento de Vitoria por no acceder a la disolución ordenada por el Supremo.
Juaristi, presidente del PNV guipuzcoano, declaró ayer a Efe que su partido se encuentra "absolutamente tranquilo" ante lo que denominó "amenaza" del Supremo, ya que considera que no existe ningún delito en la actuación de Atutxa ni en el resto de la Junta de Portavoces del Parlamento vasco. Juaristi afirmó que el Supremo "sigue ahondando en un tremendo error" por "obedecer los dictados de Aznar y Zapatero".
Según Juaristi, las resoluciones del Supremo que tratan de imponer una determinada decisión al Parlamento vasco son "una tremenda injerencia".
Suspensión de la disolución
Por su parte, Batasuna presentará hoy ante el Tribunal Constitucional un recurso de amparo contra la decisión del Supremo de disolver el grupo parlamentario, que solicita la suspensión de la ejecución de esa medida. El recurso, elaborado por el letrado Iñigo Iruin, invoca el derecho a la tutela judicial efectiva, que considera vulnerado al no estar prevista en la Ley de Partidos la disolución de grupos parlamentarios y por suponer tal medida una modificación de la propia sentencia del Supremo que ilegalizó Batasuna.
El recurrente argumenta que las sentencias firmes son inmodificables y, una vez dictadas, no pueden "resolver cuestiones que no hayan sido abordadas ni decididas en el fallo o con las que éste no guarde una inmediata o directa relación de causalidad". Recuerda también que la sentencia del Tribunal Constitucional de 8 de mayo último sobre las listas electorales vascas del 25-M interpretó que, con arreglo a la Ley de Partidos, "los efectos de la disolución de un partido se agotan en las previsiones de su artículo 12.1", entre las que no figura la disolución del grupo parlamentario, sino solamente "el cese inmediato de toda la actividad del partido político disuelto y la apertura de un proceso de liquidación patrimonial".
"Voluntarismo judicial"
El recurso considera que "estamos ante un claro ejemplo de voluntarismo judicial, pues en el auto no figuran las razones próximas o ajenas que justifiquen la medida adoptada".
Batasuna invoca también el derecho constitucional a participar en los asuntos públicos y argumenta sobre la diferente naturaleza jurídica de un partido político y de un grupo parlamentario constituido a raíz de los votos de los electores y para una legislatura determinada.
[El lehendakari, Juan José Ibarretxe, reiteró ayer al presidente del Gobierno, José María Aznar, y al líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, su "iniciativa formal" de abrir un diálogo contra el actual "bloqueo" de la situación vasca, pero recalcó que ello no incluye la polémica por la decisión del Supremo. "Por favor, que no se tuerza el argumento del diálogo, que no es para negociar si las sentencias deben o no cumplirse, eso es una cuestión que afecta al propio Parlamento vasco y a sus decisiones", indicó Ibarretxe, informa Genoveva Gastaminza.
El lehendakari señaló que "cada una de las palabras y comas" de su plan de libre asociación con España "son negociables".]
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