Enseñanza se plantea no evaluar de castellano a los nuevos inmigrantes

El actual sistema educativo, que exime de la evaluación de catalán del primer curso a los inmigrantes, será "replanteado". Así lo afirma la consejera de Enseñanza, Carme-Laura Gil, en una respuesta parlamentaria, en la que argumenta que dicha medida no responde a las necesidades de los nuevos inmigrantes, que tampoco conocen el castellano. Por esta razón, la exención del catalán podría ampliarse también al castellano.

En el escrito, que responde a una pregunta de Esquerra Republicana (ERC), Gil critica que se aplique el mismo criterio en los centros de ESO o de bachillerato catalanes a "la inmigración procedente de otros Estados" y a los escolares que vienen de otras partes de España.

En este sentido, Gil recuerda que a ambos colectivos se les exime de la evaluación de catalán durante el primer año, y opina que si eximir de castellano a alumnos procedentes de otras comunidades españolas "no tendría sentido", "ahora, en cambio, sí lo tendría para aquel alumnado de habla no castellana".

En esta línea, la consejera considera que "ciertamente, puede entenderse que existe un cierto anacronismo en la actual aplicación de la exención de la evaluación en el primer año", ya que, según argumenta, fue "pensada en relación con la incorporación del alumnado del resto del Estado al sistema educativo catalán sin tener en cuenta, entonces, la posibilidad de la inmigración procedente de otros Estados".

Por estas razones, Gil concluye: "Este departamento se replanteará la situación y probablemente se llegue a la conclusión de que hoy no sea tan adecuado hablar de exenciones como de proceso de incorporación del alumnado inmigrante a las lenguas, cosa que, en la práctica, por las instrucciones que se dan a los centros y los recursos que se ponen a su disposición a este efecto, ya es la manera ordinaria de proceder".

Actualmente, los alumnos que se incorporan a la educación secundaria obligatoria y de bachillerato de Cataluña están exentos de calificación del área de lengua catalana durante el primer año, aunque no del aprendizaje de este idioma.

Con esta medida se pretende facilitar su incorporación gradual al sistema escolar "con la tranquilidad que se desprende de la no evaluación en el primer curso", dice la consejera, quien explica que el segundo año se evalúa al alumno "de manera ponderada", mientras que en el tercer año y en los sucesivos se hace ya de "manera ordinaria".