Pujol defiende el PHN y se vanagloria de ser el único que no engaña a la gente

Jordi Pujol acudió ayer a las comarcas catalanas del Ebro a defender el voto favorable de CiU al Plan Hidrológico Nacional (PHN) y al trasvase del Ebro y a acusar a quienes se oponen a él de "engañar a la gente". El líder de CiU dio por sentado que el PHN tendrá que ser negociado de nuevo dentro de un año o año y medio, cuando haya finalizado el ciclo electoral que ahora comienza. Y vaticinó que entonces, con una correlación de fuerzas distinta en las Cortes, se verá cómo la izquierda abandona su oposición al PHN y cómo el Partido Popular (PP) asume otras condiciones.

El líder de CiU visitó ayer Móra la Nova, Móra d'Ebre y Gandesa en un nuevo esfuerzo para convencer al electorado de las tierras del Ebro de lo acertado del apoyo dado por sus diputados al PHN. Se remitió para ello al futuro, a una hipotética situación política en la que CiU tenga de nuevo la posición de bisagra en las Cortes y ello le permita negociar con ventaja tanto si el primer partido es el PP como si es el PSOE.

Pero el argumento principal de ayer era otro, basado en el pasado. El presidente explicó que en 1977 él fue el único en defender la energía atómica, mientras los demás partidos se oponían a ella y prometían, según dijo, que demolerían la central nuclear de Ascó. "Todos los demás engañaban a la gente; yo era el único que no la engañaba", afirmó orgulloso.

La idea de Pujol es que ahora sucede lo mismo. Los socialistas engañan a la gente de las comarcas catalanas del Ebro porque aquí dicen una cosa, en contra del PHN y del trasvase, pero en otras partes lo defienden. Puso el ejemplo de los presidentes de Castilla-La Mancha, José Bono, y de Andalucía, Manuel Chaves, de quienes dijo que proclaman los beneficios del PHN para sus regiones. Y, más decisivo aún, si cabe, destacó que Rodríguez Zapatero se ha comprometido durante esta campaña electoral a llevar agua a Murcia.

La oposición del PSC, como la de ERC al trasvase, reiteró Pujol, es un engaño a la gente como lo era en 1977 la promesa de demoler las nucleares y como hace tres años era según él una "irresponsabilidad" el rechazo a la central eléctrica de ciclo combinado que el Gobierno catalán proyectaba construir en Móra la Nova. Frente a la "pequeña política" y la "demagogia" que practican el PSC y ERC, agregó, "yo tengo la autoridad moral de defender siempre lo mismo".

Pérdida de votos

Pese a la seguridad con que lanzó estas acusaciones, Pujol no parecía muy convencido de que vayan a calar en el electorado de estas comarcas. Explicó que en 1977 su solitaria defensa de la energía nuclear le hizo perder probablemente algunos votos y asumió que quizá puede suceder lo mismo el 25 de mayo. "Que la gente sepa que la engañan otra vez, y, si quiere, que se deje engañar. Pero yo volveré aquí dentro de un año o año y medio y diré: habéis engañado a la gente".

Las más duras descalificaciones de Pujol fueron ayer para los republicanos. Pujol calificó a Esquerra como "el partido del no a todo". Como una fuerza "instalada en la no-responsabilidad", en "la oposición a todo".

Con el PP fue algo más prudente. Le recriminó que siga defendiendo el PHN que presentó a las Cortes. "Parece que no se hayan dado cuenta de que ése no es el PHN que se aprobó. El que se aprobó tiene unas enmiendas introducidas por nosotros que no pemiten trasvasar tanta agua". Por lo tanto, diga lo que diga el PP, "con este PHN no se pueden sacar 1.050 hectómetros cúbicos al año del Ebro".