United Biscuits crece sin Fontaneda

La fábrica Fontaneda de United Biscuits, en Aguilar de Campoo, pasó a manos del grupo Siro el pasado 1 de enero. Se ponía así fin a un año de conflictos laborales. Esta operación de venta no ha sido obstáculo, sin embargo, para que la multinacional, lejos de bajar sus ventas, las haya aumentado y multiplicado sus inversiones en otras plantas y sectores

En un sector galletero maduro, la filial española del grupo logra un fuerte aumento de ventas gracias a la política de innovación de productos

"En contra de lo que alguien pudiera entender con motivo del largo conflicto que se produjo en la fábrica de Fontaneda en Aguilar de Campoo, la operación de venta no se planteaba en ningún momento como una huida o una desinversión, sino como un plan para racionalizar la producción del grupo y apostar por la innovación", señala el consejero delegado de United Biscuits en España, Joan Casaponsa.

El acuerdo por el que el grupo Siro se hizo cargo de la planta de Fontaneda en Palencia establece la fabricación para United Biscuits en los próximos tres años de 25.000 toneladas de galletas. En materia laboral, de los 140 trabajadores de la fábrica, una veintena se han incorporado a otras plantas del grupo United Biscuits, mientras otros 120 se quedaron con el grupo Siro que en los últimos meses ya ha aumentado la plantilla en otras 20 personas. A casi un año vista del acuerdo, ambas partes se niegan a señalar los términos económicos del compromiso.

Inversión e innovación

Para el máximo responsable en España del grupo multinacional, la decisión de desprenderse de Fontaneda estaba propiciada por la necesidad de concentrar la producción de galletas en solo dos plantas modernas en Navarra y País Vasco y la no justificación de acometer inversiones en una planta envejecida donde el nuevo propietario, el grupo Siro, tiene en marcha 12 millones de inversiones para su modernización.

Cerrado el capítulo de Fontaneda, el grupo United Biscuits ha impulsado una estrategia basada en inversiones para la modernización de plantas y la innovación de productos. Según Joan Casaponsa, esa estrategia demuestra la voluntad de permanencia del grupo en España, pero también ha supuesto en el último año un crecimiento de la facturación del 15%.

En el sector de galletas, United Biscuits ha desarrollado un plan de inversiones de 12,6 millones de euros en las plantas de Orozco en Vizcaya y en Viana en Navarra. Orozco tiene capacidad para producir 28.000 toneladas de galletas y Viana 42.000 toneladas, lo que la convierte en la planta más importante del grupo en el continente. Con estas inversiones, United Biscuits da por cerradas las actuaciones en el sector galletero.

En el resto de las actividades, United Biscuits pretende mejorar su capacidad productiva en el sector de las conservas que en su día pertenecieron al viejo grupo Carcesa. La multinacional cuenta con una planta en Mérida para la fabricación de diferentes elaborados como patés, magro de cerdo o callos, todo ello bajo la marca Apis. En Don Benito se mantiene una segunda planta dedicada a la elaboración de zumos bajo la marca Fruco. El grupo se completa en Badajoz con una tercera planta en Montijo para la fabricación de tomate Apis bajo diferentes presentaciones. Fuera de Extremadura, el grupo cuenta finalmente con la factoría de Montornés del Vallés en Barcelona para la fabricación de productos de pastelería bajo la marca Royal

En relación con la actividad de conservas, las inversiones del grupo se concretarán en 12 millones de euros para la planta de Mérida donde es imprescindible una modernización de la planta y posiblemente un cambio de su actual emplazamiento hacia unazona industrial.

Para el consejero delegado del grupo, la política de inversiones ha permitido la innovación con el lanzamiento de nuevos productos y ello se ha traducido en un fuerte crecimiento de las ventas. El caso más destacable es el de Fontaneda Driver que en los dos priemros meses de este año alcanzó el 60% de las ventas previstas para todo el ejercicio.Según los datos del grupo, en 2002 la facturación en España y Portugal ascendió a 300 millones de euros frente a los 260 de 2001, mientras los beneficios antes de impuestos y amortizaciones fueron de 38,9 millones de euros con un aumento del 33% sobre el ejercicio anterior.

United Biscuits tiene España una plantilla de casi un millar de trabajadores. Es líder europeo en galletas y snacks y también lidera el mercado español de galletas con una cuota entre sus diferentes marcas del 26,5%. El grupo se constituyó en 1948. En España su desembarco se produjo en 2000 por el acuerdo entre Nabisco y United Biscuits.