La sorpresa de Berdeak
Estimado Javier Madrazo:
Mi sorpresa, y la de varios compañeros y compañeras que militamos en el ecopacifismo, ha sido mayúscula al ver reflejada en carteles de Ezker Batua (IU) la denominación de Berdeak, formación de la cual sigo siendo su titular legal y jurídico. Como sabes perfectamente, hace ya cuatro años, que Berdeak no está federada a Izquierda Unida en Euskadi. Nuestra oposición a los acuerdos del Pacto de Lizarra fue el detonante para salirnos de una formación que cada vez esta más cerca del nacionalismo etnicista que de la izquierda transformadora y alternativa. Sabes que, siendo nosotros entonces, parte integrante de EB-IU, no se nos informó de lo que se estaba firmando a espaldas de todos nosotros.
Es por todo ello que no sabemos a qué viene a estas alturas vuestra insistencia en seguir usurpando denominaciones y símbolos del ecologismo político que no os pertenecen. Sabes perfectamente que firmamos un protocolo ante notario en Bilbao en el que se dejaba bien claro la no utilización por parte de Ezker Batua de la denominación de Berdeak.
Que nadie se llame a engaño. El que yo y otras personas vayamos en listas del Partido Socialista de Euskadi es una decisión libre de estar con el que más sufre y paga su defensa por la libertad, con el asesinato de compañeros, por parte de la anacrónica y totalitaria organización terrorista ETA. Espero que, en coherencia con lo acordado en su día, no engañes a los electores. Pues Berdeak está donde siempre ha estado. Esta vez no nos presentamos en las elecciones municipales y forales. Por lo contrario, apoyamos activamente las listas que, desde la izquierda, preconizan la defensa de la Constitución y el Estatuto de Gernika.
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