_
_
_
_
Reportaje:ELECCIONES 25M | La batalla por Madrid

Sólo el 2,5% de los extranjeros empadronados podrá votar

En la región hay más de 530.000 inmigrantes registrados

Luz Estella Barboza se quedará en casa el próximo 25 de mayo. A esta colombiana de Pereira le gustaría poder votar y participar así en la vida política de Madrid, una ciudad donde decidió afincarse hace casi un lustro. Pero no podrá hacerlo hasta obtener la nacionalidad española, que ya ha solicitado tras dos años como residente legal. "Vivo y trabajo aquí, estoy recibiendo de este país y también estoy aportando, así que debería tener el derecho a participar en las elecciones", argumenta esta mujer, de 47 años, en el quiosco de helados y golosinas que regenta en Aluche.

La situación de Barboza no es, ni mucho menos, minoritaria. En Madrid están empadronados más de 530.000 extranjeros. Pero sólo un 2,5% de ellos podrán acudir a las urnas el 25

Más información
IU propone que los inmigrantes que lleven un año en España puedan votar
Fernández promete recuperar e impulsar el patrimonio histórico de la región
Los socialistas proponen que el Prado amplíe su horario
Un sondeo del PP destaca la inseguridad como principal problema

-M. Ninguno votará en las elecciones autonómicas, ya que ese derecho está restringido a los españoles. Y en las municipales sólo podrán participar los 13.740 ciudadanos noruegos y de la Unión Europea que han comunicado a la Oficina del Censo Electoral su intención de hacerlo.

El resto de los inmigrantes se abstendrá a la fuerza, tanto los sinpapeles (que suponen cerca de la mitad de los empadronados) como los que tienen permiso de residencia. Los únicos votantes de origen extracomunitario serán los noruegos, que participan porque su país es el único que tiene un acuerdo de "reciprocidad" con España en temas electorales, y los que hayan adquirido la nacionalidad española. Unos 16.000 extranjeros se nacionalizan cada año en todo el Estado.

Problemas

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Barboza trabajaba en Colombia como administrativa, pero los problemas económicos y de empleo de su país le llevaron a cambiar de continente. "Al principio me dediqué, como la mayoría de mis compatriotas, a cuidar personas mayores, pero yo quería emprender algún pequeño negocio y por eso monté el quiosco. Con el quiosco no tengo suficiente para vivir y enviar dinero a mis padres y mi hijo de 17 años que está estudiando, así que vendo seguros y hago otros trabajos que van saliendo", asegura. Comenta, divertida, que en la Cámara de Comercio de Madrid figura como empresaria. Si pudiera votar no sabe qué opción tomaría. "Escucho a los candidatos, pero como sé que no puedo ir a las urnas tampoco estoy prestando tanta atención", concluye Barboza. Suele hablar poco de temas electorales con sus compatriotas: "Hay muchos que no tienen ni papeles, así que como para pensar en votar".

Rafaela Galante, de 25 años, sí podrá elegir alcalde y concejales, ya que ella es italiana. "Hace tres años, cuando vine a España, no me preocupaba votar porque me sentía de paso, pero ahora que he decidido quedarme quiero tener derecho a elegir los políticos que van a decidir sobre mi vida", explica esta licenciada en Ciencias Políticas que llegó a Valladolid con una beca Erasmus y que desde hace un año vive en Madrid y colabora con la ONG Aieti en proyectos de investigación con Latinoamérica.

Galante, que está empadronada en el barrio de Lavapiés, tiene decidido votar al PSOE. "No es que me reconozca del todo en ese partido, pero yo fundamentalmente soy de izquierdas", asegura. Ella trata con pocos inmigrantes comunitarios. Pero sí tiene amigos latinoamericanos y marroquíes que viven con frustración no poder hacer oír su voz.

"La guerra de Irak ha influido en que sea más la gente, tanto españoles como extranjeros, la dispuesta a demostrar su desacuerdo con la política del Gobierno. El derecho al voto que tenemos los comunitarios debería extenderse a los ciudadanos de otros países porque es básico decidir quién gobierna", concluye esta mujer nacida en San Marco, una ciudad del sur de Italia.

Entre los 13.470 electores extranjeros, los más numerosos son los italianos (2.770), franceses (2.660), alemanes (2.399), británicos (2.050) y portugueses (1.499). Los grupos más reducidos son los de los luxemburgueses (8 personas) y los noruegos (10). En la región están empadronados más ciudadanos comunitarios y noruegos, pero esos 13.470 son los que comunicaron su intención de votar a la Oficina del Censo Electoral antes del pasado 14 de abril. En el caso de los noruegos se les exige llevar más de tres años empadronados.

Gheorghe Gainar, presidente de la Asociación Cultural de Ayuda e Integración del Pueblo Rumano, lleva once años viviendo en Alcalá de Henares. Siempre que puede participa en los actos municipales relacionados con la inmigración. La ciudad le gusta y en ella ha cimentado su futuro y el de su esposa y sus dos hijos. Pero el próximo 25 de mayo no podrá decidir quién quiere que lleve la vara de mando municipal. Tiene permiso de trabajo y residencia desde hace nueve años, así que le falta uno para cumplir los diez que necesita para solicitar la nacionalidad española. Y mientras no puede votar.

"A mí, como a la mayoría de los inmigrantes, me gustaría participar en la vida política, no sólo votar, también, si llega el caso, formar parte de alguna lista electoral que ofrezca una mejora a los trabajadores extranjeros. En Alcalá estamos empadronados 8.000 rumanos y nuestro voto podría tener algún peso", asegura este hombre de 44 años nacido en Transilvania, que trabaja por las noches en un horno de pan. Pero la mayoría de sus compatriotas o no han cumplido los años suficientes para adquirir la nacionalidad o ni siquiera tienen papeles. "Hay también gente reacia a nacionalizarse española por no perder la ciudadanía rumana", añade. Él se define de centro izquierda.

530.000 extranjeros

De los 530.000 extranjeros empadronados en Madrid, según los últimos datos de la Oficina Regional para la Inmigración, el 26% son ecuatorianos; el 14%, colombianos; el 9%, marroquíes; el 5,7%, rumanos, y el 5%, peruanos. Para solicitar la nacionalidad española a cada colectivo se les exige un tiempo de residencia legal: dos años en el caso de los latinoamericanos, filipinos y ecuatoguineanos; cinco, los asilados, y diez todos los demás (africanos, asiáticos, del este europeo).

Tampoco Emmanuelle Cas, una francesa de 32 años, tiene decidido qué papeleta elegirá. "Algo decidiré, aunque la verdad es que ningún partido me convence", asegura. Vive en Madrid desde hace diez años, pero antes no se había preocupado por participar en los comicios.

El alcaldable cubano

Guillermo Ponce, cubano de Santa Clara nacionalizado español, es el único candidato de origen extranjero que compite por la alcaldía de la capital. Pero este médico de 34 años tiene pocas posibilidades de llegar a sentarse en el salón de plenos, ya que se presenta por el PRIM, uno de los partidos minoritarios de la región.

Casado con una española, llegó a Madrid en 1997 y obtuvo la nacionalidad en 1999. Ésta es la primera vez que puede votar. Y además de elector ha decido ser candidato. "Conocí a Nicolás Piñeiro, presidente del PRIM, a través de su hija y su propuesta me pareció interesante porque es un partido independiente, que puede luchar por Madrid sin seguir la disciplina marcada desde un aparato central", explica este galeno, padre de dos niñas.

¿Le presentarían a él si el partido tuviese más posibilidades de obtener algún concejal en la Casa de la Villa? Ponce asegura que sí. "Mi candidatura es algo pensado, no sólo un golpe de efecto, porque creemos que la participación de los inmigrantes en la vida política favorece su integración", concluye. La integración de los trabajadores extranjeros y la mejora de los servicios sanitarios de emergencia serían dos de sus prioridades si gobernase.

Las elecciones municipales son las únicas a las que pueden presentarse candidatos extranjeros, pero sólo los comunitarios y los noruegos.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_