Sanidad desconoce el origen del brote de legionela que afecta a 7 personas

El foco de contagio del último brote de legionela de Alcoi sigue sin conocerse. Una semana después de la detección de los primeros casos y tras los análisis realizados en las instalaciones de riesgo, los técnicos han logrado delimitar la zona de contagio a la vista de las encuestas epidemiológicas realizadas a los pacientes, pero no el foco emisor de la bacteria, que se ha cobrado ya siete enfermos con el de ayer. Mientras, el Ayuntamiento está pendiente del cobro de dos sanciones a empresas que no comunicaron que tenían instalaciones de riesgo.

El último caso es un hombre de 50 años, como confirmó ayer el director general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad, Manuel Escolano, que se desplazó a Alcoi para presidir la reunión del Consejo del Area de Salud convocada para analizar las causas y consecuencias del último brote de legionela. Escolano no descartó la posibilidad de que aparecieran nuevos contagios y se mostró molesto cuando se le preguntó sobre los pacientes con neumonía que habían ingresado en el Hospital Virgen de los Lirios sospechosos de tener la enfermedad. "Los casos de legionela oficiales son los que da Sanidad que no se confirman hasta que concluyen los análisis de orina de los pacientes", señaló.

No arrojó más luz a la hora de determinar la fuente de este brote. Explicó que los técnicos habían delimitado, dentro del casco urbano de Alcoi, la zona geográfica de contagio a la vista de las encuestas epidemiológicas de los pacientes aunque matizó que no había confirmación del foco. Para explicar esto dijo que en las 29 instalaciones detectadas en este área de contagio (10 en funcionamiento, 16 precintadas, dos desmanteladas y una inutilizada) se habían realizado la toma de muestras y análisis de PCR que no han sido concluyentes. Añadió que los técnicos estaban realizando "todas las técnicas analíticas posibles" a través de la identificación de la bacteria por ADN, PCR y de cultivos que no habían sido concluyentes, y que se estaban analizando los análisis.

A partir de este último brote, el Ayuntamiento de Alcoi ha comenzado a aplicar con firmeza el decreto de prevención de la legionela ya que está pendiente del cobro de dos sanciones leves impuestas a empresas que no comunicaron a las autoridades que poseían instalaciones de riesgo. Ambas se arriesgan a una multa de 3.000 euros. El concejal de Sanidad, Julio Fontoba, agregó que otros dos expedientes por faltas graves, con multas de entre 3.000 y 15.000 euros, habían entrado en la fase final para su resolución. Julio Fontoba, que tuvo que llamar por teléfono a los técnicos municipales para conocer el estado de los expedientes sancionadores tramitados, dijo que los técnicos municipales están analizando las alegaciones presentadas por los representantes de estas dos empresas de Alcoi a las que se les ha tramitado denuncia por falta grave.