El Ejecutivo pagará el 76% del futuro tranvía de Vitoria, que costará 83,5 millones
El alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso, y el consejero de Transportes, Álvaro Amann, cerraron ayer varios de los flecos pendientes para la puesta en marcha del tranvía de Vitoria, que en 2006 recorrerá ocho kilómetros de la ciudad tras dos años de obras de construcción.
El coste de la infraestructura se elevará definitivamente a 83,5 millones de euros: 0,7 millones para el proyecto constructivo, 9,1 millones destinados a cocheras y talleres, 16,8 millones para la compra de ocho vagones y 56,8 millones dirigidos a infraestructuras viarias y urbanizaciones complementarias.
Euskotren, la firma pública que gestionará el tranvía, pagará las cocheras y los vagones, mientras que las tres instituciones implicadas en el proyecto (Ayuntamiento, Gobierno y Diputación) se repartirán los gastos de infraestructuras. Amann precisó que su departamento se hará cargo del 65% de los casi 57 millones de este apartado, con lo que la aportación global del Ejecutivo se elevará en conjunto al 76% del presupuesto global.
Una comisión mixta resolverá en septiembre las cuestiones aún pendientes. Ayuntamiento y Diputación asumen que desembolsarán en conjunto 20 millones de euros, pero Alonso quiere que los arreglos urbanos que suponga la construcción del trazado también corran a cargo del Ejecutivo. Amman subrayó que en el caso del tranvía de Bilbao, su departamento asumió un porcentaje similar al que plantea ahora en Vitoria.
El teniente de alcalde vitoriano, Javier Maroto, acusó ayer al Gobierno autónomo de haber gastado "cero euros" en transporte público en la capital alavesa en los últimos cuatro años.
