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Reportaje:

El toreo, un arte eterno

Carlos Fuentes analiza su 'taurofilia' en Sevilla antes de presentar en Madrid su novela 'La silla del águila'

Margot Molina

Al escritor mexicano Carlos Fuentes, que llegó el pasado miércoles a Sevilla para dar el pregón taurino de la Feria de Abril en la Plaza de la Maestranza, le gusta enfrentarse a los tópicos, diseccionarlos hasta llegar al centro de su génesis. Su estancia estos días en la capital sevillana le ha permitido acercarse a dos de los grandes tópicos andaluces: Toros y Semana Santa.

Para Carlos Fuentes, que se marcha hoy a Mallorca para disfrutar de unos días de descanso antes de iniciar, en Madrid el próximo 6 de mayo, la presentación de su última novela La silla del águila (Alfaguara), el toreo es "el máximo ritual que le queda al hombre para actualizar su relación con la naturaleza".

El escritor, periodista, editor y diplomático de 74 años, uno de los principales exponentes de la narrativa en lengua española, pisó por primera vez una plaza de toros en 1945, en México D. F., toreaba Manolete y desde entonces es "taurófilo". Incluso el protagonista de uno de sus cuentos publicado en la década de los ochenta, Viva mi fama, es un torero sevillano. "Es un cuento sobre Goya y un torero que vive en dos épocas, la actual y la del pintor. Hay una personaje femenino, la Madreselva, que es maestra de torerillos, la que los recibe y los introduce en los toriles. El cuento es mi homenaje a Sevilla y a Andalucía", comentaba ayer el novelista mexicano que ha recibido importantes premios a lo largo de su carrera como el Cervantes (1987), el Príncipe de Asturias (1994) y el Premio a la Latinidad (1999), galardón que conceden las academias de las Letras de Francia y Brasil.

"No he conocido figura igual, en elegancia y valentía, que Manolete. Parecía una pintura de El Greco pero, a la vez, tenía los pies bien plantados en la arena", asegura el autor de El espejo enterrado y La región más transparente.

"El toreo tiene mucha competencia de otros medios de entretenimiento, sobre todo de la televisión, pero es un arte eterno. Cuando hay una plaza llena y se ve una gran faena, como la que hizo Enrique Ponce la semana pasada en la Plaza de la Maestranza, es insuperable", sentencia el novelista.

"Sevilla para mí ha sido siempre una ciudad de regalos, de ofrendas. Nunca me va a pasar la cuenta. Me ha dado tanto que no tengo con qué pagarle", dice el escritor que ha aprovechado su estancia en la ciudad para grabar un programa sobre El Quijote para la televisión de Puerto Rico en el que aparece junto a José Saramago y Arturo Pérez-Reverte. Fuentes, que leyó por primera vez la novela de Cervantes cuando tenía 11 años, asegura que repite cada año, por Semana Santa.

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Es la tercera vez que el escritor mexicano y su esposa, Silvia Lemus, visitan la capital andaluza durante Semana Santa, lo que para él es "uno de los grandes espectáculos del mundo, porque es a la vez una experiencia individual y colectiva".

"Cada costalero, cada nazareno asume una responsabilidad personal, pero también es un gran evento colectivo. Tiene ese doble magnetismo de ser expresión individual y colectiva", explica el autor de Los años con Laura Díaz (Alfaguara, 1999).

"Hice una serie de televisión sobre los tópicos españoles, Semana Santa, toros y flamencos, en la que participaba la BBC. Cuando salieron las procesiones, los ingleses dijeron que los españoles eran idólatras, y en la parte taurina, que eran sangrientos. Entonces me enojé y les espeté: ¿Y la caza del zorro qué es, un juego de naipes?", recuerda el novelista mexicano, un perfecto caballero por dentro y por fuera.

"La política tiene los mismos laberintos"

La nueva novela de Carlos Fuentes, La silla del águila (Alfaguara), es una crítica a la clase política de su país, México, pero el escritor asegura que podría trasladarse a cualquier sitio: "Andaluces, rusos, norteamericanos, franceses, argentinos, brasileños... Los subsuelos de la política tienen los mismo temblores y se mueven por los mismos laberintos en todo el mundo", asegura el autor de La muerte de Artemio Cruz, uno de los pocos que todavía usa tinta para escribir y piensa que "el libro es un objeto sensual". "Yo soy de pluma y papel. Dios me libre del ordenador, que es cómo hacer el amor con condón. No sabe igual", confiesa.

El escritor llevaba 20 años madurando La silla del águila pero los cambios políticos en su país durante todo ese tiempo le hicieron replantearse el tema. "Cuando empecé a madurar la idea, la sucesión dentro del PRI se hacía a dedazo. Después ha habido alternancia en el poder y eso me hizo cambiar el eje de la novela; aunque no los personajes y las intrigas", explica.

Carlos Fuentes cuenta cómo el tema de la trama actual se lo dio el ex presidente Bill Cliton cuando le preguntó: "¿Porqué en México no hay vicepresidente?, ¿qué pasaría si el presidente fallece durante su mandato?"

"Yo le expliqué que los hubo hasta el siglo XIX pero que se dedicaban a tumbar a los presidentes para sentarse ellos mismos en la silla del águila y qué, precisamente por eso, el presidente eliminó el cargo".

El novelista, siempre vinculado a la realidad social desde sus obras, asegura que tras la intervención del Gobierno de George Bush han adquirido protagonismo las ideas de mayo del 68. "Ha habido una movilización nunca vista de la opinión pública mundial, algo que no ocurrió con la Guerra del Golfo. Por un lado, hemos asistido a una derrota del derecho internacional; pero también a un triunfo del periodismo y de la opinión pública. La información ha llegado a más gente ahora", comenta.

"El mundo del consumo es soportable siempre que la política domine al mercado, no al revés. Pero cuando las razones del mercado se convierten en una guerra mundial como la que ha iniciado el Gobierno Bush ya no tiene sentido", concluye.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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