El arzobispo de Pamplona pide perdón por la connivencia de la Iglesia navarra

El arzobispo de Pamplona, Fernando Sebastián, ha pedido públicamente perdón por la connivencia eclesiástica en el fusilamiento de 3.000 republicanos navarros tras el golpe de Estado del general Franco. Sebastián, no obstante, reitera que "en sentido estricto literal" la afirmación de que la jerarquía de la Iglesia católica fue corresponsable de las matanzas "no es verdadera y resulta ofensiva para el obispo, los sacerdotes y los fieles católicos de entonces y de ahora".

El arzobispo de Pamplona ha esperado una semana para dar una respuesta pública al Parlamento de Navarra y a los familiares de los fusilados y desaparecidos en 1936. La Cámara regional aprobó con el voto de todos los partidos, excepto UPN, una resolución solemne en la que se adjudica una corresponsabilidad directa a la jerarquía eclesial en la organización de los fusilamientos de miles de republicanos navarros.

Sebastián finalmente se ha retractado y ha decidido zanjar la polémica sin denunciar ante los tribunales al legislativo navarro por tales afirmaciones, que consideró "injuriosas".