Maragall pide en Bruselas que Cataluña sea circunscripción electoral europea

El presidente del Partit dels Socialistes (PSC), Pasqual Maragall, propuso ayer en Bruselas que Cataluña se convierta en circunscripción electoral en los comicios europeos. Lo dijo durante una conferencia en la sede en Bruselas del Patronat Català pro Europa, organismo dependiente de la Generalitat, en la que se mostró partidario de aumentar el reconocimiento "de los pueblos, nacionalidades y regiones" en el proceso de construcción europeo mediante el federalismo y la aplicación del principio de subsidiariedad.

Actualmente, España es una circunscripción única en los comicios europeos. El sistema de elección de los eurodiputados depende de cada país y ayer Maragall apostó abiertamente por convertir Cataluña en circunscripción electoral, una fórmula también reivindicada por los partidos nacionalistas.

A diferencia de Convergència i Unió (CiU), el PSC también quiere que Cataluña sea circunscripción electoral en las elecciones autonómicas con el objetivo de que los votos de todos los ciudadanos tengan el mismo valor. Maragall se entrevistó ayer con representantes del casal catalán en Bruselas, a los que entregó una copia de su propuesta de ley electoral catalana, que prevé un diputado en representación de los catalanes que viven en el exterior.

No obstante, éstos mostraron mayor interés aún en tratar de resolver otro tipo de problema: se quejaron de que el canal internacional de TV-3 no emite los partidos del Barça y que se ven obligados a seguirlo a través de la televisión autonómica madrileña.

El líder socialista catalán, que también se entrevistó con el comisario europeo de Economía, Pedro Solbes, y el de Justicia e Interior, António Vitorino, afirmó que una de sus prioridades si se convierte en presidente de la Generalitat será la relación con el norte de África. Fuentes de su entorno explicaron que Maragall proyecta realizar un viaje a Marruecos y Argelia para antes del verano. El jefe de la oposición socialista al Gobierno de Jordi Pujol reprochó a éste y al presidente del Ejecutivo central, José María Aznar, que hayan descuidado, en su opinión, las relaciones con los países del Magreb, y elogió como contraposición la actitud del presidente francés, Jacques Chirac.