Podas en Móstoles

Hago llegar mi queja por la poda excesiva, indiscriminada y casi siempre innecesaria que se lleva a cabo en este país, y, más concretamente en Móstoles, en el barrio Estoril II. Todos los años por estas fechas, como quien cumple con un rito macabro o como quien quiere demostrar cuánto hace por la ciudad, los responsables municipales de esta y otras ciudades se lanzan a una campaña de poda y tala infame.

Esta actividad es dañina para los árboles, los afea, los desequilibra, se les transmiten enfermedades y confiere a nuestros parques un aspecto antiestético, además de privarnos de la necesaria sombra en verano. No se entiende qué motivos hay para que año tras año se acometan campañas de poda innecesarias, inadecuadas y dañinas; no se entiende cómo en otras localidades y en otros países con mayor tradición cultural se procura tener árboles de gran porte y muchos años y aquí se les maltrata, poda y tala apenas tienen unos años y alguna altura. ¿Es por razones económicas o por simple odio al árbol? ¿Dónde están los ecologistas y las asociaciones de vecinos? ¿No tienen los árboles quien les defienda de las tropelías municipales y de las escuadrillas de hacha y motosierra?

Se sabe perfectamente que esta política es un gran error porque la mayoría de los árboles no necesitan ser podados, no deben ser podados; que cuando se les poda una vez se les condena a ser podados en el futuro porque se altera su crecimiento natural; que únicamente deben quitarse las ramas que por sus características o disposición puedan representar peligro o que impidan la visibilidad de las señales de tráfico en las calzadas.

En nombre de los árboles, solicito que se detengan inmediatamente las podas.